Nuevas contradicciones con el testimonio de las acusadas por el asesinato de Secundino Prego

Pontevedra

En la segunda sesión del juicio por el asesinato del octogenario Secundino Prego, ninguna de las declaraciones soporta la versión de las dos acusadas, es más, si ayer Albertina Táboas decía no recordar nada desde la noche del suceso hasta entrar en los calabozos unos días más tarde, hoy la primera pueba fue una grabación de una llamada telefónica a la Guardia Civil realizada por Albertina Táboas la noche de los hechos, en la cual denunciaba un robo en casa de Secundino, con el asesinato del mismo, por parte de dos encapuchados. En dicha grabación, se escucha además la voz de Rocio Gondar dando indicaciones a Albertina de lo sucedido.

El siguiente de los testimonios del día pertenece al hijo de Secundino, Eduardo Prego, quien afirma que su hermana escuchó a Albertina en el Tanatorio decir “Secundino non morreu do primeiro golpe” en un tono altivo, lo cual hizo sospechar a Eduardo y desconfiar de Albertina.

Por otra parte Bernardino Graña, ex pareja de Albertina, relató que la enfermedad de la acusada no le impide hacer vida normal, y que no solía perder la memoria, como ocurrió ayer en su declaración. Bernardino afirma no saber nada de lo sucedido, simplemente acercó a Rocío y a Albertina a Casa de Secundino para dormir con él, como era habitual.

Lo más destacable de esta mañana fue la declaración de Elvira Piñeiro, quien puso en contacto a ambas acusadas, Elvira está bajo tratamiento pues padece trastorno bipolar, aún asi, y derrumbándose en ocasiones por su unión con Rocío, pudo recordar que Albertina había dicho en su casa que buscaba a alguien que matase a Secundino, incluso que pagaría 10 mil euros por ello, eso si , después de hacerlo para evitar que la timases. Todo esto Elvira en su momento se lo tomó a broma, y no le dio mucha importancia, pero después de lo sucedido que lo puso en conocimiento de la Guardia Civil.

Durante la mañana pasaron por el juicio en la Audiencia Provincial varios testigos relacionados con lo sucedido, entre ellos Manuel Lorenzo que conocía a Secundino de haberle ayudado en un robo anterior que había sufrido. Recordaba este testigo que Albertina estaba muy interesada en tener contacto con él y que incluso le comentó que tenía miedo a que atacasen a Secundino, textualmente le dijo que “cualquier día al regresar de La Luna, le volverían a atracar en el camino de su casa ”