Sangría inesperada en el Calderón
Un Betis digno en la primera media hora se desmorona en la recta final del primer tiempo, para acabar siendo un pelele en manos del Atlético hasta encajar cinco goles

Kiko Huesca (EFE)

Sevilla
Lo dijo bien claro Merino en la previa del encuentro: si se perdía, que fuese dejando buenas sensaciones de cara a lo que le viene al Betis en las próximas jornadas. Pues ocurrió todo lo contrario. Los verdiblancos, tras una media hora larga digna en el Calderón, acabaron descomponiéndose y encajando una manita que esperemos no le pase factura en lo moral. Y es que el sábado, el calendario le da la opción de casi solventar la permanencia si es capaz de ganarle al actual colista y aún directo rival, el Levante.
Muy pocos esperaban el sainete bético en el Calderón. Ante un Atlético de Madrid con tantas bajas en defensa, pensando en el partido del martes en Champions ante el Barcelona, y con algunas dificultades ante equipos que se plantan bien en el campo como hizo el Betis durante más de media hora, nadie hubiese adivinado en el minuto 35, por ejemplo, que el marcador sería tan escandaloso. Y no cayeron más porque Adán, pese a comerse el segundo gol en un fallo clamoroso, lo evitó con varias paradas de gran mérito.
La defensa hizo aguas por todas partes desde el minuto 36 -cuando Fernando Torres convertía en gol un pase de Koke, que le asistía cómodamente- mientras que el mediocampo nunca se impuso pese al esperanzador comienzo de los jóvenes Ceballos, Fabián y Musonda. Y como los futbolistas de banda del Betis apenas desbordan al rival, el equipo, pese al aseado comienzo, apenas inquietaba al Atlético, por mucho que estuviesen ausentes Godín, Giménez o Savic y que los centrales fueses los inexpertos Lucas y Monsalve, debutante hoy. Así, lo único positivo, como en San Mamés, fue el gol de Rubén Castro, para marcar su gol número 16 y para mantener su olfato de gol, algo absolutamente imprescindible en este Betis tan carente de calidad, físico y nivel competitivo.
Lo peor, no obstante, es la imagen dada, porque el peligro de caer al precipicio aún permanece. Quedan siete jornadas y la permanencia no está atada, ni mucho menos. El colchón de puntos es amplio pero no ganarle al Levante supondría meterse definitivamente en el lío. Las evidencias respecto a los múltiples errores de planificación cometidos en el Betis -y defendidos por cierto entorno cada vez más nocivo para el club- son claras, pero el partido del próximo sábado es fundamental para el Betis. Es momento, por tanto, de aparcar rencillas y problemas, aunar esfuerzos en certificar la permanencia y empezar cuanto antes a trabajar en la próxima temporada. A ver si de una vez por todas alguien da con la tecla adecuada para poner al equipo a la altura del potencial social de la institución.
FICHA TÉCNICA:
Atlético de Madrid (5): Oblak, Juanfran, Lucas, Monsalve, Filipe Luis, Augusto (Kranevitter, minuto 78), Gabi, Saúl (Thomas, minuto 69), Koke, Griezmann y Fernando Torres (Correa, minuto 64).
Real Betis (1): Adán, Molinero, Pezella, Westermann, Montoya, N'Diaye, Cejudo (Damiao, minuto 59), Fabián (Kadir, minuto 49), Dani Ceballos, Musonda (Xavi Torres, minuto 70) y Rubén Castro.
Goles: 1-0, minuto 36: Fernando Torres. 2-0, minuto 41: Griezmann. 3-0, minuto 65: Juanfran. 3-1, minuto 79: Rubén Castro. 4-1, minuto 81: Griezmann. 5-1, minuto 91: Thomas.
Árbitro: González González, castellano-leonés. Amarillas para Koke, Pezzella, Kadir y Xavi Torres.




