Fallece un bombero en la extinción del incendio de la calle Uría
Eloy Palacio, de 54 años, murió bajo los cascostes al derrumbarse la última planta del edificio
Los bomberos evacúan el cuerpo de su compañero fallecido por la ventana del edificio incendiado / Pablo Canga
Oviedo
Un bombero del Servicio de Extinción de Incendios del ayuntamiento de Oviedo, el sierense Eloy Palacio, ha perdido la vida mientras participaba en las tareas para sofocar el fuego declarado a media mañana de este jueves en la segunda planta del edificio que ocupa el número 58 de la calle Uría de Oviedo. El fallecido fue sepultado por los cascotes al derrumbarse el último piso del inmueble, cuando trabajaba junto a otro compañero –herido de consideración- desde una cornisa.
A las cuatro y veinticinco de la tarde, los bomberos municipales y los refuerzos aportados por el Servicio de Emergencias del Principado tenían por fin controlado un incendio que, durante más de cinco horas, había devorado casi por completo la estructura del edificio y había causado graves daños en los inmuebles colindantes, especialmente el número 25 de Melquíades Álvarez, en realidad la fachada trasera del mismo bloque. De forma inesperada, la cuarta planta del edificio se derrumbó tragándose literalmente a los dos bomberos. Sus compañeros lograron rescatar con vida al primero de ellos, pero tras una hora de rastreo entre los escombros sacaban al exterior los restos mortales de la única víctima mortal. Ely Palacio tenía 54 años, y era vecino de Pola de Siero.
El edificio siniestrado había sido restaurado hace unos 15 años, pero fue construido a finales del siglo XIX. Su estructura básica, toda de madera, lo convirtió en una auténtica trampa mortal inaccesible para los bomberos, que por momentos se vieron desbordados. Según algunos testigos, se subestimó la gravedad del suceso y se relajaron las medidas del dispositivo de extinción. Poco después del mediodía, se había iniciado la fase enfriamiento de un incendio serio pero no excesivamente grave; en cuestión de minutos las llamas salían por todas las ventanas del edificio.
El bombero herido fue trasladado al Hospital Central de Asturias y en principio no se temía por su vida.
La investigación pertinente deberá determinar las causas del incendio, aunque las primeras hipótesis apuntaban a un cortocircuito en la instalación eléctrica del edificio.
