El obispo agradece la "huella de bien" dejada por Castillejo en Córdoba
Alrededor de un millar de personas se dan cita en la Mezquita Catedral para despedir al ex presidente de Cajasur. El gobierno municipal no ha estado representado en el funeral.
Córdoba
Alrededor de un millar de personas ha despedido al que fuera presidente de Cajasur, Miguel Castillejo, en su funeral. Oficiado por el obispo de Córdoba, Demetrio Fernández, la ceremonia ha servido de "gratitud y reconocimiento" hacia el sacerdote mellariense, cuya figura a elogiado Fernández en su homilia.
Entre los asistentes muchos colaboradores de Castillejo durante sus casi treinta años de presidencia de Cajasur, entre ellos el que fuera jefe de los servicios jurídicos de la entidad durante la etapa más compleja y dura en su relación con la Junta de Andalucía, Diego Jordano. Pero también otros representantes del mundo judicial, como el magistrado del Tribunal Supremo y ex presidente de la Audiencia Provincial, Eduardo Baena, ex rectores de la Universidad de Córdoba como José Peña o Amador Jover, representantes del mundo sanitario como Carlos Pera o del mundo empresarial como Maria Dolores Jiménez o Rafael Gómez Sandokán, que no ha dudado en compartir con los periodistas su amor hacia Castillejo a quien ha calificado de "amigo" y al que pensó llamar la pasada semana para decirle "Don Miguel, te quiero y te quiere mi familia" ha asegurado.
Notable ha sido la presencia de miembros del Partido Popular cordobés, encabezado por su presidente y ex alcalde José Antonio Nieto que junto al subdelegado del gobierno, Juan José Primo Jurado y otros ediles ocupaban las tres primeras bancadas junto al féretro. Igualmente notable ha sido la ausencia del gobierno municipal que no ha estado representado. Sí la Junta de Andalucía, a través del delegado provincial de Cultura, Francisco Alcalde.
Acompañado por todos los miembros del Cabildo Catedralicio, Demetrio Fernánez, ha destacado la "huella de bien" dejada por Castillejo en Córdoba.
A la cita se han sumado otros rostros conocidos de la sociedad cordobesa como el torero Finito de Córdoba y su mujer Arantxa del Sol, que han destacado la "cordialidad y amistad" de Castillejo, quien ofició su boda y el bautizo de uno de sus hijos.