Balcón municipal o casa de Tócame Roque

Valencia

No es la primera vez que las pancartas son objeto de polémica en el Ayuntamiento. Durante un tiempo los plenos se llenaban de ellas, la mayoría contrarias a Zapatero. Se pactó entonces no colocar ninguna. Ahora la polémica pasa del hemiciclo al balcón. Un balcón que ha pasado de estar cerrado a cal y canto a, por fortuna, ser plataforma de algunas reivindicaciones.

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No se trata de prohibir las pancartas, es bueno que lo gobernantes, que las instituciones tomen partido. Pero creo que debe hacerse con las causas que sobre generen consensos. De lo contrario el balcón se convertirá, perdón por la expresión, "casa de Tócame Roque".