Valdano: "El Madrid fue la culminación, pero no la felicidad"
El argentino dialoga con Segurola y la psicóloga Patricia Ramírez en Vejer
Vejer de la Frontera
El principio es la pelota. Así arranca todo. “Yo dormía abrazado al balón”, ha confesado Jorge Valdano. “Hay muchas más cosas pero la pelota es el principio”. Así ha empezado su diálogo 'Más fútbol y menos prozac’ con la psicóloga Patricia Ramírez, moderado por el periodista Santiago Segurola.
El fútbol como vehículo para la felicidad ha sido el asunto central de la charla mantenida entre los tres. Patricia Ramírez habla del momento flow, que permite al jugador y al espectador permanecer “absorto” mientras dura el juego. “El tiempo pasa rápido o lento según las emociones”, añade.
Segurola ha defendido la nostalgia que evoca la máxima felicidad siempre enfocada en el fútbol. “Tengo muchísimos amigos que me dicen que el momento de máxima felicidad es cuando jugaban de niños con la pelota”, ha dicho el periodista. Ramírez ha añadido la explicación científica. “El cerebro retiene mejor los recuerdos positivos, los que vienen cargados de emoción, y gran parte de lo que se vive jugando, se mantiene”, ha detallado.
Segurola ha corrido a preguntarle a Valdano si fue más feliz cuando jugaba como niño o cuando alcanzó la titularidad en el Real Madrid. Valdano lo ha tenido claro. “El Madrid fue la culminación pero nada que ver con la felicidad”, ha confesado. “Había mucha presión. Yo recuerdo que cuando me llamaban para la selección argentina, ésa era mi semana de reposo, de tranquilidad y eso que en Argentina siempre se ha llevado el fútbol con gran exageración”.
Valdano ha explicado que se sentía mucho más feliz cuando era elegido el primero en la pachanga con los amigos en la pandilla que cuando fue seleccionado para el Mundial. Y Patricia Ramírez le ha recordado la otra cara. “Esa selección cruel de antes del partido para que dos capitanes compongan su equipo por orden de preferencia provoca mucha frustración entre los niños que son elegidos los últimos”.
Segurola, Ramírez y Valdano han coincidido en destacar que el fútbol envuelve muchos aspectos de la vida. “Es el juego”, dice Ramírez, “muchos animales, los más evolucionados, pasan el día jugando. Seríamos mucho más felices si dejáramos de tomarnos la vida tan en serio y jugáramos más”.