Caballero, el PSdeG y el rock and roll

La fotografía de Sergio Soto (21/04/2016)
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A Coruña
Solo los grandes rockeros pueden salir con soltura de sus propias contradicciones (manteniendo su prestigio intacto). Cuidan su imagen de golfos y presumen con desdén de ella, practican con pasión el vicio, pero al tiempo escriben las mejores canciones de amor de la historia.Muestran sin tapujos su vida desenfrenada, al límite de todo lo estropeable en un cuerpo, pero algunos han decidido llegar a ancianos en tan formidable estado de forma que pueden permitirse enseñar el ombligo sin que resulte ridículo. Es rock and roll, imaginen si no a su suegro.
No hace mucho, él, todavía sujetaba una guitarra en la televisión local. En el vídeo, que se hizo viral a través de Whatsapp, nuestra compañera de Radio Vigo, Paula Montes, se esforzaba por vencer el sonrojo y ejercer con dignidad de corista. Abel Caballero tocaba en tres acordes el <<Campana sobre campana>>. Caballero, alcalde de Vigo, es un tipo diferente. Como los viejos rockeros afronta sus contradicciones sin que estas mermen un ápice su autoestima. En 1985 ya era ministro, ahora habla de la nueva y la vieja política situándose, claro, del lado de la nueva. En sus respuestas a los periodistas combina dureza y dulzura en proporciones casi cómicas; pero, como los viejos rockeros, él puede permitírselo, forma parte de su esencia. De Caballero destacan muchos su gran capacidad de gestión, su abrumadora formación, su acumulación de victorias que le han convertido en virrey de la provincia de Pontevedra y gran barón socialista de Galicia. Sin embargo nada de esto importó durante estos años.
El verdadero punto de inflexión llegó la pasada Nochebuena cuando, guitarra en mano, lanzó su mensaje de Navidad: “La felicidad es lo más importante en la vida, usémosla cuando la tenemos” – dijo -. Después los Rolling anunciaron su concierto en La Habana y ahí llegó el último empujón. Ahora Caballero está de gira. Ha comprendido que Galicia necesita rock and roll. Él está dispuesto a dárselo, él,una figura que polariza y maneja después las batallas como nadie. Si formara parte de la política coruñesa J. R. R. Tolkien tendría que regresar para escribir en una nueva entrega de su saga su enfrentamiento con el jefe de gabinete de Xulio Ferreiro. Sería épico.
Tanto han resonado sus conciertos que González Formoso no ha podido resistirse a señalar que él también tiene algo que decir o que cantar. Si el PP de Fraga se hizo famoso por su centenar de gaiteros, el PSdeG siempre se ha caracterizado por sus guitarras de heavy metal.




