“Lo que ocurrió aquella noche no fue un mero accidente: fue una imprudencia”

Madrid

Recta final del juicio del Madrid Arena, en la que la fiscal Ana Muñoz se ha expresado en términos contundentes para apuntar directamente a todos los acusados como culpables directos de las cinco muertes: "Lo que ocurrió aquella noche no fue un mero accidente, no fue una fatalidad, fue una imprudencia consecuencia de acciones y omisiones descuidadas", ha asegurado en las conclusiones finales.

Para Muñoz, los responsables son los acusados, que "incurrieron en conductas descuidadas y negligentes, faltando a las normas de la prudencia y o bien crearon un peligro para la vida y la integridad física de los asistentes o bien no neutralizaron el riesgo creado".

La Fiscal, en este tramo final del juicio de la tragedia, ha ido exponiendo aquellos aspectos del operativo de seguridad que a su juicio fallaron y desembocaron en las cinco muertes: El control de acceso "no fue en absoluto riguroso y se fue flexibilizando a medida que avanzaba la noche", y el recuento de entradas demuestra que "se ha sobrepasado claramente el aforo autorizado" por Madridec.

Responsabiliza directamente, entre otros, a Miguel Ángel Flores, quien asiste al alegato desde primera fila del banquillo de los acusados, enfrentándose a una petición de cuatro años de cárcel por parte del Ministerio Público. Detrás suyo, el doctor Simón Viñals ha escuchado cómo la Fiscal aseguraba que había aceptado unas responsabilidades "por encima de su edad", destacando su incapacidad para practicar maniobras de reanimación. Para él piden un año de cárcel.

De la misma manera, la Fiscal también ha tomado la palabra para explicar por qué el Ministerio Público ha decidido retirar la acusación, entre otros, contra el entonces Inspector Jefe de la Policía Municipal de Madrid, Emilio Monteagudo, al considerar que no tiene responsabilidad penal en las muertes. 

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