Nueva final, el colista y la enfermería

Zaragoza

Con seis jornadas por disputar y después de al menos otras tantas con el calificativo de final, a nadie escapa que el partido del domingo vuelve a ser decisivo en el camino de regreso del Real Zaragoza a primera división.

El conjunto aragonés no pudo traerse los tres puntos del Toralín y en consecuencia no pudo recortar distancias con el Deportivo Alavés que marca el ascenso directo, circunstancias que reducen todavía más el margen al error para el equipo blanquillo.

"Quedan seis partidos en los que nos jugamos la vida". Así de rotundo se mostró Leandro Cabrera sobre la transcendencia de cada uno de los partidos que le quedan al Real Zaragoza por disputar, empezando por el próximo domingo y por el filial del Athletic.

Los cachorros son colistas y tan sólo las matemáticas les hace albergar esperanzas de salvación aunque la realidad indica que a todos los efectos los cachorros ya son equipo de segunda divsión b pero todavía pueden soltar algún zarpazo, empezando por el domingo y la Romareda ya que "hay noventa minutos y por más que sea el colista complica a quién sea, el otro día se lo pudieron bien jodido al Leganés. Juegan bien y por eso tenemos que salir a ganar y aunque no será fácil vamos a dar la cara y lo vamos a dejar todo".

Lluis Carreras otra vez tendrá que modificar el once y otra vez se le ha caído un jugador por lesión. Pedro se perderá al menos los tres próximos encuentros mientras que sigue pendiente de la evolución del esguince de rodilla de Freddy Hinestroza, que parece ir por buen camino. 

Las lesiones siguen marcando el día a día desde antes de que comenzará la competición y ni Ranko Popovic ni Lluis Carreras han podido disfrutar de la plantilla al completo, nada nuevo para la plantilla porque "lamentablemente es una dinámica que lleva dos años sin cortarse pero no podemos comernos la cabeza, sólo debemos pensar en jugar porque si pensamos en el tema nos lesionamos más", subrayo Cabrera.