ASOVICA se consolida como líder en creación de empleo para personas con enfermedad mental en Castilla y León

Soria

ASOVICA, la entidad soriana sin ánimo de lucro, nació en 1993 con la misión de mejorar la calidad de vida de las personas con enfermedad mental y sus familias. Está compuesta por más de 450 socios y atiende diariamente a más de 100 personas con enfermedad mental. El grupo se ha convertido en líder en creación de empleo para personas con enfermedad mental en Castilla y León, es uno de los 10 más importantes de España, y continúa creciendo

El Grupo está compuesto por la asociación de familiares de enfermos psíquicos Virgen del Camino, la fundación FADESS y sus dos centros especiales de empleo ASOVICAUTO Y SERVIFADESS. La gerente de Asovica, Natalia Briongos, explica que “ya superamos los 60 puestos de trabajo destinados al colectivo de personas con enfermedad mental en sus proyectos de manipulación y montaje de componentes del automóvil, en conserjería, limpieza, y en las entidades Caja Rural y Huertos de Soria, además de los creados en la residencia de Los Royales”.

El proyecto de empleo se fundamenta en prestar servicios a empresas externas, “pero también en ofrecer servicios en la red de recursos de la propia entidad, como son los centros ocupacionales, centros de día, viviendas apoyadas y terapéuticas, ayuda a domicilio, programas de rehabilitación psicosocial, y apoyo psicológico a usuarios y familiares”.

La gerente de Asovica confiesa que el éxito en la creación de empleo reside “en el autoabastecimiento, tanto de recursos humanos como del reciclaje de elementos que convierten productos artesanales”.

En noviembre de 2014 y tras cinco años de gestiones, abrió sus puertas la residencia que gestiona la Asociación de Familiares de Enfermos Psíquicos Virgen del Camino (Asovica) con siete usuarios, en la actualidad da servicio a 25 enfermos psíquicos de Soria y otros 15 venidos desde distintos puntos de Castilla y León, un total de 40 plazas.

Este nuevo servicio de Asovica para enfermos mentales ha generado ya un total de 25 empleos, 15 de ellos los desempeñan personas con patologías psíquicas, en labores de limpieza, jardinería o mantenimiento del propio centro.

Se trata de un centro que dignifica al enfermo psíquico y es un elemento clave en su recuperación. “No se trata de que sea una estancia definitiva. La idea es que el programa de rehabilitación ayude a los residentes a ganar en autonomía y puedan acceder a una vida normalizada. La residencia estará estructurada en módulos independientes, una especie de viviendas individuales que permiten a los usuarios conjugar su privacidad con otras zonas y servicios comunes”.

La residencia está dirigida a personas con enfermedades mentales graves y crónicas cuyos deterioros en su funcionamiento psicosocial les impide vivir de un modo independiente, con edades comprendidas entre los 18 y 65 años, ausencia, inadecuación o imposibilidad temporal o definitiva de apoyo familiar o social, y a personas enfermas mentales sin apoyo familiar que se encuentran en situación de exclusión social o grave riesgo de marginación sin hogar.

La construcción del edificio ha contado con un presupuesto de 3,4 millones de euros. El 70% ha sido aportado por la Junta de Castilla y León y el 30% restante por Asovica con fondos propios y subvenciones que ha ido recibiendo. El Consistorio de la capital cedió la parcela en la que se ha erigido el edificio.