Baleares siempre fue "gay friendly"
'La línea roja' de Matías Vallés (19/05/16)
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Palma de Mallorca
La homosexualidad era un crimen en Gran Bretaña hace solo medio siglo. Para entonces, Balears ya servía de refugio a quienes apostaban por la diversidad sexual.
Basta citar la palabra Ibiza para desterrar cualquier atisbo de rechazo a toda opción sexual en Balears.
El Parlament ha aprobado una ley para garantizar los derechos de las distintas esencias y opciones sexuales. Es un texto necesario, pero no denuncia una situación, sino que consolida una actitud que se remonta a la oscuridad de la dictadura franquista. Y que se extiende a otras actividades, como el nudismo.
Ni siquiera cabe hablar de la lamentable tolerancia que rezuma superioridad, sino de la aceptación con la tranquilidad característica de esta tierra.
El consenso sobre esta ley en el Parlament sería inviable en otras comunidades.
Hasta los conservadores demuestran que Balears ha sido 'gay friendly' desde antiguo, aunque sea bajo la fórmula que popularizaron el homosexual Oscar Wilde y el Republicano Ronald Reagan. "No tengo objeción a la vida sexual de nadie, mientras no la practiquen en la calle y asusten a los caballos".
La ley se presenta erróneamente como un rosario de sanciones, pues debió ser una fiesta. El texto legal no triunfará cuando reinen las multas, sino cuando se imponga la risa. Porque el sexo sin humor, ni es sexo ni es nada.
