El gobierno del Botánico cumple un año

Valencia

Este martes se cumple un año de las elecciones autonómicas, que dieron el triunfo al PP, pero con resultado insuficiente para conformar gobierno. Por ello hoy, un año después, los líderes políticos han hecho balance del ejecutivo que salió del Pacto del Botánico.

El presidente del Consell, Ximo Puig, ha definido este año como un año de diálogo. El diálogo que reclamaban los valencianos y que está presidiendo la acción de un gobierno que no ha hecho sino colocar las bases de lo que Ximo Puig define como "el renacimiento valenciano", la recuperación de nuestra imagen tras ser emblema de corrupción.

Por su parte, el síndic de Compromís, Fran Ferri, destaca que el objetivo claro de este gobierno son las personas y cita como ejemplo la reparación a las víctimas del accidente del metro de Valencia. Ferri afirma que la Comunitat Valenciana poco a poco deja de ser referencia de la corrupción y empieza a ser noticia por propuestas como la del barco de los refugiados. Admite, quizá, que algunas de las cosas previstas van más lentas de lo esperado, por algunos imprevistos, pero también por el agujero que el PP ha dejado en las arcas de la Generalitat.

Mientras, Podemos se muestra muy satisfecho de haber contribuido a la conformación del gobierno y del trabajo realizado en las instituciones, porque en muchos aspectos llevan la iniciativa legislativa. No obstante, Antonio Montiel insiste en que el Pacto del Botánico se ha de revisar y, sobre todo, se fija en los presupuestos del año que viene, pues deben dejar de mirar atrás y abrir la puerta a la participación ciudadana.

Y en la oposición, el PP. Su presidenta, Isabel Bonig, afirma que la gestión del ejecutivo de Puig no ha existido y que el Consell vive de las rentas que dejó el PP con algunas iniciativas, sobre todo en empleo. Afirma Bonig que es más un gobierno de postureo que de gestión.

Y en la misma línea Alexis Marí, de Ciudadanos, que asegura que el Consell vive en el lamento constante y que la infrafinanciación que padecemos y debemos combatir no ha de ser la excusa para no gestionar.