Universidades privadas y hospitales públicos
Si potenciar lo privado era una decisión política legitima, darle le vuelta a la tortilla también es una decisión política que no debe extrañar
La Columna de Carlos Arcaya | Universidades privadas y hospitales públicos | 02/06/2016
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Alicante
Es una cuestión legal. Digo esto porque parece que la presidenta regional del PP, Isabel Bonig, se extraña de que el actual Consell rechace que los estudiantes de Medicina de universidades privadas puedan hacer prácticas en hospitales públicos.
También es cierto que la decisión, en el caso de la provincia de Alicante, supone cerrar las puertas a la llegada de campus privados -como el que se pretendía instalar en Sant Joan d'Alacant- y apostar por la Universidad de Alicante, una universidad pública, cuyo rector en las pasadas elecciones pidió una facultad de Medicina ya que existe suficiente demanda en esta provincia.
A Bonig le puede molestar que se pinche la burbuja, en expresión utilizada por el rector Palomar para definir la proliferación de universidades privadas en la Comunitat Valenciana durante los gobiernos autonómicos del PP. Pero si entonces, potenciar lo privado era una decisión política legitima, darle le vuelta a la tortilla también es una decisión política que no debe extrañar.
En cualquier caso, por cierto, si quieren se puede admitir que el debate sea entre lo público y lo privado pero nunca sobre si se cercena o no el derecho a elegir de los universitarios.