¿Y ahora qué?

Zaragoza

Más allá de firmar en Palamós uno de los mayores y más vergonzosos fracasos en la historia reciente del club, el Real Zaragoza queda económicamente muy tocado en su linea de flotación.

Por cuarta temporada consecutiva el equipo blanquillo jugará en segunda división, lo que activa el calendario de pagos tras el proceso concursal de algo más de un millón de euros que los dirigentes de la entidad tratarán de renegociar con los acreedores. 

También debe afrontar pagos por valor de casi cuatro millones con la Agencia Tributaria después de varios vencimientos que desembocaron en una duro y exigente acuerdo con Hacienda.

Además, la entidad, que hubiera recibido unos 45 millones de euros en concepto de derechos audiovisuales en caso de ascenso a primera división, cobrará poco más de ocho en segunda, con el agravante que el no clasificarse para disputar las eliminatorias de promoción le supone dejar de ingresar un millón y medio extra.

La realidad del Real Zaragoza es muy incierta y los patronos deberán buscar ingresos adicionales para cuadrar el próximo presupuesto encontrando capital externo, a través de algún traspaso o con la aportación de los propios dueños.

REUNIÓN DEL CONSEJO DE ADMINISTRACIÓN

El lunes está previsto que los miembros del consejo de administración del Real Zaragoza se reúnan mañana formalmente para tomar las primeras decisiones de cara a la próxima temporada. Las conversaciones y llamadas telefónicas entre los dirigentes han sido una constante en el día después de la vergüenza de Palamós.