Educación tendrá que decidir si anula las pruebas de la Lomce por no respetar el anonimato

Madrid

La normativa que regula las pruebas de 3º y 6º de Primaria de la Lomce estipula el carácter anónimo de los cuestionarios de contexto que se deben realizar a los alumnos y a sus familias, previos a las pruebas de evaluación. Son cuestionarios que miden el nivel socioeconómico del alumnado. Incluyen preguntas sobre la satisfacción del alumnado en el centro, de determinados aspectos del colegio, de la enseñanza impartida, sobre el profesorado y su labor. Según la FAPA Giner de los Ríos, no se respestó el anonimato exigido por la normativa vigente en el proceso de entrega de los cuestionarios. "Las quejas han venido principalmente porque cuando se han entregado y recogido esos cuestionarios, el centro ha podido identificar quién respondía y qué respondía cada uno, tanto por parte del alumnado como por parte de las familias", explica José Luis Pazos, presidente de la Federación.

Es por ese motivo que la FAPA Giner de los Ríos ha registrado ya ante la consejería de Educación un escrito en el que pide la nulidad de pleno derecho de estas evaluaciones. "En base a esa vulneración de la confidencialidad, consideramos los cuestionarios nulos y, por tanto, al estar relacionados con la evaluación, la propia prueba la consideramos nula", añade Pazos, "pedimos que no figure nada en el expediente del alumno".

Según el escrito presentado ante la consejería, la información personal que se solicita en el cuestionario de contexto resulta amparada por la Constitución Española, así como por los previsto en la legislación sobre protección de datos, en tanto en cuanto afecta a un derecho fundamental. Sin ninguna dificultad, añade el documento, el centro educativo ha podido determinar a quien pertenece cada uno de los cuestionarios aunque solo figurara una clave de centro y un número de alumno en los documentos entregados al alumnado y las familias. Estas claves, no cumplen con los requisitos exigidos por la legislación para entender realizada una disociación de los datos personales del interesado, según la FAPA. Además, dice el escrito, no se garantizó la confidencialidad de los datos en la entrega de los cuestionarios al centro por parte de las familias ni se respetó la intimidad de los alumnos ya que este documento fue rellenado en presencia del profesorado y bajo su supervisión.