El exalcalde de Bunyola dice que no sabía que la farola con la que murió un joven estaba averiada
Arranca con incidentes el juicio contra Jaume Isern por la muerte por electrocución de un joven en 2014

Cadena SER

El exalcalde de Bunyola, Jaume Isern, quien este jueves se sienta en el banquillo de los acusados a raíz del fallecimiento de un joven de 18 años tras electrocutarse con una farola averiada en las fiestas del municipio, ha asegurado que "en ningún momento me comunicaron que había problemas" con el estado de la instalación eléctrica.
Así lo ha puesto de manifiesto a preguntas de la fiscal María Moretó durante el juicio que ha arrancado en el Juzgado de lo Penal número 4 de Palma. También está siendo juzgado un electricista municipal. La Fiscalía solicita un año y medio de cárcel para cada uno de ellos por un delito de imprudencia grave con resultado de muerte.
Tras ser inquirido por la representante del Ministerio Público, el exprimer edil se ha negado a responder a las preguntas de la acusación particular. Preguntado por su abogado, Eduardo Valdivia, Isern ha manifestado que aún no había accedido al cargo cuando el Consistorio solicitó presupuesto para la mejora de la instalación eléctrica de Bunyola.
La jornada se ha iniciado con incidentes. A las afueras de los Juzgados de Vía Alemania se han congregado tanto familiares del fallecido como de los inculpados, quienes a su llegada a las dependencias judiciales han sido increpados a gritos de "asesinos".
Muerte de un joven en 2014
Los Juzgados de Vía Alemania acogen el proceso contra el exalcalde de Bunyola, Jaume Isern y el electricista municipal por la muerte de un joven que falleció electrocutado tras tocar una farola durante las fiestas del pueblo en 2014.
La Fiscalía pide un año y medio de prisión para Isern y el electricista al considerarles autores de un delito de imprudencia grave con resultado de muerte.
Según el escrito de la Fiscalía, el alcalde y el electricista no adoptaron las mínimas normas de cuidado para el mantenimiento del alumbrado público en el municipio. Por eso, según el fiscal, la farola presentaba deficiencias en su protección mecánica.
La noche del 31 de agosto de 2014, un joven de 19 años se subió a la barandilla en la que se encontraba la farola y al apoyarse en ella recibió una descarga de al menos 137 voltios que le produjo la muerte de forma inmediata. La farola es propiedad del Ayuntamiento, que es el resposable de su cuidado y mantenimiento, según la acusación.




