Ana Pastor se estrena con otra "afrenta" a las víctimas de Angrois

Santiago de Compostela

La sorpresa que se llevaron los representantes de la asociación de víctimas del accidente del Alvia en Santiago fue mayúscula. En el Ministerio de Fomento no los esperaban ni Ana Pastor —la flamante presidenta del Congreso que los había citado este fin de semana— ni su sustituto, Rafael Catalá —secretario de Estado de Infraestructuras en el momento del accidente—. Allí sólo estaban el presidente de Renfe, el de Adif y el sucesor de Catalá en la secretaría, Julio Gómez-Pomar.

"Fue una afrenta, una burla". Por eso, ni siquiera se molestaron en sentarse. Sólo les dejaron por escrito sus tres reivindicaciones: la creación de una comisión de investigación técnica independiente —la anterior fue desautorizada por un informe de la UE—; una comisión de investigación parlamentaria y una exigencia a Pastor: "Que pida perdón públicamente por engañar a las víctimas y ocultar las verdaderas causas del accidente".

"Allí había padres que han perdido a sus hijos, gente que ha perdido a sus hermanos y la verdad es que no damos crédito", aseguró a la SER el presidente de la asociacion, Jesús Domínguez. "Les he dicho al presidente de Renfe, al de Adif y al secretario de Estado de Infraestructuras que si tienen hijos, que yo entiendo que quieran defender otros intereses pero que hay 80 muertos y lo que estamos pidiendo es muy democrático".

Recordó que Bruselas ha "certificado" el intento del Estado de "ocultar la verdad". "No entiendo por qué nos hacen pasar todo este calvario, pero al final todo se sabrá, como en el metro de Valencia. Seguiremos luchando porque tenemos la verdad de nuestra parte y contra eso no se puede luchar", concluyó.