Un privilegio del primer mundo

Soria

El próximo curso los niños sorianos podrían aprender una asignatura más en la Educación Primaria Obligatoria: la Religión Islámica. La consejería de Educación está a la espera de que la Comunidad Islámica de Soria le dé traslado de tres currículum vitae de tres personas que puedan impartir la materia.

Según las últimas informaciones que nos trasladaba la dirección provincial de Educación semanas atrás, serían tres colegios los que podrían acoger estos estudios: los centros escolares de Las Pedrizas, La Arboleda y Numancia, todos ellos en la capital soriana. Por cierto, los tres primeros de toda la Comunidad. Había entonces en torno a 120 solicitudes de alumnos. La asignatura también será evaluable, como la religión Católica.

Y la pregunta esta mañana es..... ¿y si en vez de incluir clases de más religiones en los colegios, eliminamos las clases de religión católica? La religión, donde debe estudiarse, es en casa, y no en el colegio; me da lo mismo la religión que sea.

La Comunidad Islámica defiende que siempre es mejor que los alumnos reciban la enseñanza de su religión en la escuela y por cauces correctos y no por otros canales como Internet por los que se pueden radicalizar. Ya, pero mejor es que la reciban en casa o en los centros adecuados para ello; al igual que la religión católica.

Otra cosa muy diferente sería estudiar en los colegios la historia del Islam, cuándo aparece, qué directrices sigue, dónde, quiénes, qué facciones, y qué interpretaciones y por qué, se hacen del Islam. Eso sí, ayudaría a comprender, ligeramente, lo que está ocurriendo en Oriente pero también en Occidente. Pero aleccionar en dogmas, de la religión que sea, supone una involución social. Estudiar historia de las religiones sí, educar en la fe, en los lugares destinados para ello.

Desde mi opinión, la religión, cualquiera, lo que hace es alienar al ser humano sin terminar de satisfacer sus verdaderas necesidades, únicamente desviando sus deseos de justicia y felicidad del mundo humano al mundo divino aferrándose en un más allá que se supone que solucionará lo que no puede el más acá. Marx lo definió estupendamente cuando dijo que la religión es el opio del pueblo; pero nuestra colaboradora de la tertulia joven, Beatriz Águeda, lo definió el último día en la tertulia joven aún mejor y es que cuando volvió de su viaje a Haití, se dio cuenta de que ser ateo es un privilegio del primer mundo.

Dicho esto y siempre con el máximo respeto por la creencia y práctica de cada uno, la formación e información en los colegios públicos, y los dogmas en casa.