Poca seguridad, mucho botellón
Los vecinos de Pombo-Cañadío denuncian que el fin de semana que cerraba la Semana Grande en Santander concentro en Cañadio más de 9000 personas sin apenas presencia policial

Momento en el que unos jóvenes lanzan bengalas en la Plaza de Cañadio abarrotada de gente / Radio Santander (Radio Santander)

Santander
No es una situación inédita pero hacia mucho que no se veía una concentración de gente tan numerosa en la Plaza con más ambiente en la noche de la capital cántabra. Los vecinos de la Asociación Pombo-Cañadio-Ensanche lamentan que este pasado fin de semana y durante la celebración de toda la Semana Grande las medidas de seguridad han sido mínimas.
Ricardo Alea presidente de esta agrupación vecinal calculan que tanto en la madrugada del pasado viernes como en la del sábado, más de 9000 personas se concentraron en la Plaza de Cañadio e inmediaciones, una gran parte de ellos, eran jóvenes realizando botellón que consumían alcohol en la vía pública sin que la policía actuará. Y es que el Ayuntamiento, ya ha explicado en otras ocasiones que hacerlo podría tener consecuencias trágicas.
Uno de los momentos de mayor tensión se vivió cuando pasadas las tres de la madrugada unos jóvenes encendieron varias bengalas ocasionando una gran nube de humo que obligo a varias personas a abandonar la zona.
Los Hosteleros también han exigido al Ayuntamiento que tome medidas para frenar el botellón en pleno centro de la ciudad, ya que esta práctica que se repite cada fin de semana, daña la imagen de la zona y perjudica tanto a los clientes que consumen en los bares como a los hosteleros que pagan sus impuestos para poder estar abiertos a esas horas.
Ángel Cuevas presidente del colectivo le pide al Consistorio que sea tan escrupuloso con la normativa como a la hora de exigir a los locales de ocio nocturno que cumplan con los horarios de cierre.




