"La Constitución no puede entenderse como un código penal"

Barcelona

La portavoz del Gobierno catalán, Neus Munté, ha querido lanzar este martes un aviso en el Estado y el Ejecutivo español, remarcando que el TC debería ser "un árbitro para dirimir sobre la constitucionalidad de las leyes”, pero recordando que no debería entenderse "como un tribunal ejecutor" ni la Constitución "como un código penal".

Munté ha hecho estas declaraciones en la rueda de prensa posterior a la reunión del Gobierno catalán y poco después de que cuatro secretarios judiciales hayan notificado a todos los consejeros y al presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, la resolución del alto tribunal sobre las conclusiones del Proceso Constituyente, que les avisa de que no pueden actuar en base a las conclusiones de la comisión

A pesar de haber recibido esta advertencia del TC, Munté ha querido reafirmar que el ejecutivo catalán quiere "mantener la obediencia al mandato democrático del 27-S", dando así a entender que harán caso omiso de los avisos pero sin querer explicitar si desobedece o no al Constitucional.

Pero esto parece no haber hecho cambiar la perspectiva del ejecutivo catalán. De hecho, la portavoz ha apuntado que para ellos el TC "tiene la función legítima de dirimir sobre la constitucionalidad o no de normas y leyes", pero ha avisado al gobierno español y el Estado que desde Cataluña "no se entiende que entre a dirimir sobre opiniones y debates de carácter político ". "El TC lo entendemos como un árbitro para las leyes, no es en ningún caso como un tribunal ejecutor, ni se puede entender la Constitución como un código penal, y demasiado a menudo se hacen referencias y esta línea", agregó avisando el Estado de su perspectiva.

Durante la rueda de prensa posterior al Consejo Ejecutivo, Munté fue preguntada en varias ocasiones por la reunión que el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, debe tener con miembros de la CUP para hablar de la cuestión de confianza a la que se someterá en septiembre. Munté no ha querido desvelar la fecha ni si será antes o después de las vacaciones de Puigdemont, pero ha mantenido que el encuentro existirá. "Es obvio que hay contactos y reuniones con diferentes formaciones políticas, no sólo con la CUP, pero no hay ninguna negociación", dijo la portavoz, añadiendo que "de contactos" con los anticapitalistas "hay siempre y del que se trata es de que se vayan produciendo.

El Gobierno no se volverá a reunir hasta el próximo 30 de agosto, y el presidente tiene previsto iniciar sus vacaciones el próximo lunes.