17.000 personas apagan las brasas de las últimas barbacoas del Carranza
El fuerte viento de levante marca el adiós definitivo a esta fiesta, que deja en 2016 un total de 12,7 toneladas de basura

Aspecto de la playa Victoria en las últimas barbacoas del Carranza, año 2016 / Ayuntamiento de Cádiz

Cádiz
Unas 17.000 personas, con un pico puntual de 25.000 asistentes en torno a las 2:00 horas, ha participado en la última edición de las barbacoas del Carranza, una celebración que ha transitado a un modelo más cercano a un macrobotellón en la playa y que lleva suscitando un intenso debate en torno a su convocatoria en los últimos años.
El Pleno del Ayuntamiento de Cádiz decidió hace meses aprobar una propuesta, elevada por una mesa creada para debatir el futuro de esta fiesta y compuesta por representantes políticos, del colectivo vecinal, ecologistas y hosteleros de la ciudad, que abogaba por la supresión de las barbacoas del Carranza en 2017 y por acotar el espacio habilitado para realizarlas en 2016.
La zona destinada a la celebración de las barbacoas se ha circunscrito al espacio comprendido entre los módulos 3 y 6 de la playa Victoria y la playa de La Caleta.
El Ayuntamiento de Cádiz detalla que el evento dejó 12,7 toneladas de basura en la playa que fueron recogidas por los 210 operarios de limpieza que conformaban el dispositivo especial y que dejó la zona acotada para estas barbacoas (entre los módulos 3 y 6) limpia a 8:00 horas.
Durante la noche, las 25 personas que formaban el dispositivo de seguridad atendieron 62 incidencias, de ellas 46 en el módulo central. La mayoría de estas intervenciones se debían a comas etílicos por consumo de alcohol, todas ellas de menores, y para realizar lavados oculares por presencia de arena y cuerpos extraños que viajaban en suspensión gracias al fuerte viento de levante.
El único incidente reseñable que se ha producido durante el desarrollo de estas actividad tuvo lugar sobre las 5:30 horas, cuando un menor con domicilio de Jerez de la Frontera se negó a abandonar la playa y acabó agrediendo a uno de los 65 agentes de la Policía Local del dispositivo especial para las barbacoas, por lo que se han abierto diligencias por un presunto delito de resistencia y atentado a la autoridad.
El origen y el final
Esta celebración, que surgió a raíz de la concentración espontánea de gaditanos en las playas una vez acababa el Trofeo Ramón de Carranza, llegó a congregar a más de 200.000 personas en los primeros años de la década de 2000 coincidiendo con el llamamiento que hizo a la ciudadanía la por entonces alcaldesa de la ciudad, Teófila Martínez, para que lograr un récord Guinness de personas haciendo una barbacoa en la playa a la vez.
Esa masificación, impulsada desde el propio Consistorio, fue en declive después de que diversos incidentes y estampas de suciedad en las playas tras la fiesta abrieran un intenso debate en la ciudad sobre la conveniencia de que se siguiera celebrando y convocando.
Sin embargo, el actual equipo de gobierno del Ayuntamiento de Cádiz abogó el pasado año por aumentar el espacio habilitado para las barbacoas del Carranza argumentando que la ciudadanía así lo requería.
Pese a estos argumentos, en 2015 las barbacoas del Carranza congregaron a poco más de 30.000 personas en las playas gaditanas, confirmando así el progresivo descenso de participantes.
Ha sido este año 2016 cuando el equipo de gobierno ha decidido crear una mesa para debatir el futuro de esta fiesta en la que han estado representados diversos agentes sociales y colectivos de la ciudad, y en la que se ha consensuado una propuesta para suprimir las barbacoas del Carranza en 2017 que ha sido aprobada por el Pleno del Ayuntamiento de Cádiz.




