El Cabildo prohíbe a los peregrinos de Candelaria circular por tres de senderos tradicionales
El riesgo de incendios forestales sigue siendo alto. La prohibición no afecta a rutas situadas fuera del ámbito forestal
Santa Cruz de Tenerife
El Cabildo de Tenerife ha modificado el dispositivo de seguridad previsto para la peregrinación a Candelaria debido al alto riesgo riesgo de incendios forestales. Ha prohibido expresamente caminar por los tres principales senderos que transcurren a través del monte. El que parte de la Caldera de Aguamansa hasta Arafo, pasando por La Crucita y la Caldera de Pedro Gil, el conocido como "sendero jacobeo" por Santa Úrsula y el que se inicia en la zona de Acentejo y acaba en Igueste de Candelaria.
Estas rutas son las más utilizadas por los aproximadamente 7.000 peregrinos del norte de la Isla, según cifras de años anteriores que maneja el Cabildo insular. Teniendo en cuenta que son 200.000 la media de caminantes que alcanzan Candelaria, la prohibición no perjudica a demasiada gente. El consejero de Medio Ambiente del Cabildo tinerfeño, José Antonio Valbuena, ha insistido en que la medida "no se hace para perjudicar a la gente, sino por seguridad", y que no hay alternativas para quienes vayan por el monte: serán sancionados por infringir la ley.
Al no haber una demanda suficiente como para variar, por ejemplo, las líneas de guaguas o establecer rutas alternativas, los peregrinos del norte deberán trasladarse al sur o a la zona metropolitana para comenzar desde allí su trayecto, porque la prohibición no afecta a las rutas de peregrinación situadas fuera del ámbito forestal.