Ofrenda a la Virgen de la Paloma en clave nacional
Todos los portavoces municipales, salvo Manuela Carmena, y la Presidenta Cristina Cifuentes opinan sobre la situación de la posible investidura.
Declaraciones en la ofrenda floral a la Virgen de la Paloma, en la previa de la misa en su honor
Ayuntamiento de Madrid
Madrid
La ofrenda floral a la Virgen de la Paloma ha pasado de ser una fiesta municipal, a un acto político en clave nacional. Todos los políticos que han atendido a los medios han opinado sobre la formación de gobierno, salvo la Alcaldesa, Manuela Carmena. El resto dos bloques claros; PP y Ciudadanos presionando al PSOE para su abstención y los socialistas negando la mayor.
La que más duro atacó fue Cristina Cifuentes. La Presidenta de la Comunidad acusó a Pedro Sánchez de "estar de vacaciones y está dedicándose a tomar el sol y a bloquear la posibilidad de que España tenga un gobierno".
Además, Cifuentes pidió una vez más al PSOE que "permita el gobierno que han querido la mayoría de los españoles" y añadió que "si fuésemos a terceras elecciones seríamos el hazmerreír de Europa".
La otra parte del frente de presión al PSOE la formó Ciudadanos. Begoña Villacís, portavoz de la formación naranja en el Ayuntamiento, pidió a los socialistas "un comportamiento responsable" y "que se abstenga para que pueda haber un gobierno en España".
En el otro lado del frente, Purificación Causapié. La portavoz socialista en el Consistorio aclaró que "no hay silencio en el PSOE" y defendió que la postura "es la que marcó el Cómite Federal y es un no al gobierno de Rajoy".
Manuela Carmena evitó hacer declaraciones como los demás políticos antes de la misa y bajada del cuadro de la Virgen de la Paloma. Sí hablo después pero se abstuvo de entrar en temas nacionales.
La regidora alabó el acto religioso que consideró "muy bonito" y declaró que la Paloma es una celebración "totalmente enraizada en la cultura popular de Madrid".
Entrando en matería política, fue cuestionada por un tema recurrente como la suciedad en Madrid. La Alcaldesa ha declarado que "dentro de unos meses habrá un nuevo contrato de recogida de basuras" y que "se va a seguir trabajando para que Madrid sea una de las ciudades más limpias del mundo".
