El incendio de Jerte presenta una "evolución positiva" tras arrasar 900 hectáreas de escaso valor ecológico

Mérida

La Consejería de Medio Ambiente, Rural, Políticas Agrarias y Territorio de la Junta de Extremadura ha decretado a las 8 de este sábado el Nivel 2 de peligrosidad para el incendio declarado en la noche del pasado jueves en la Reserva Natural de la Garganta de los Infiernos, entre los municipios cacereños de Jerte y Tornavacas para el que se ha solicitado un refuerzo en la participación de dotaciones nacionales que colaboren en la extinción de las llamas.

El incendio, que actualmente no conlleva riesgos para la población, sigue activo y sin controlar por lo que desde primera hora de la mañana un total de 18 medios aéreos y 13 brigadas contra incendios trabajan para sofocar un incendio que según la consejera de Medio Ambiente, Begoña García tiene "evolución positiva" ya la alta humedad de la noche ha impedido una excesiva propagación de las llamas.

Según las primeras estimaciones, se calcula que las llamas han arrasado entre 800 y 900 hectáreas que en todo caso no serían de alto valor ecológico, pues afecta a una zona de difícil acceso a pie de matorral, piornos y brezos, si bien sí habría entrado "muy poco" en zona de roble y encinar. Además está restringido el acceso a la zona de los pilones del jerte de forma preventiva y por seguridad.

La Asociación Natura 2000 ha afirmado que la existencia de varios focos en el incendio de la Garganta de los Infiernos del Valle del Jerte, que ha arrasado el collado de las Yeguas y la umbría de la Reserva Natural, "es un claro indicio" de que ha sido intencionado.

En un comunicado, la asociación conservacionista ha subrayado que ha denunciado en varias ocasiones que la mano del hombre está detrás de los incendios en las zonas más altas del Valle del Jerte, usualmente para convertir el pastizal en cenizas que permitan rebrotar nuevos pastos con las lluvias otoñales.