El Gobierno ofrece diálogo a los mandos de Policía Foral que dimitieron
La consejera de Interior se reune con ellos y les reprocha su "inadmisible" actitud
Pamplona
la consejera de Interior, María José Beaumont, se ha reunido con una representación de los mandos de Policía Foral que dimitieron.
Les ha ofrecido diálogo reconociendo que los aspectos salariales y de jornada de la nueva ley de Policías es "manifiestamente mejorable", pero les ha reprochado su "inadmisible" actitud que ha creado una "innecesaria alarma social".
Beaumont ha mantenido una larga reunión en el departamento en la que ha reiterado que la negociación está abierta y no hay nada decidido. Ha añadido que el Gobierno está, no obstante, obligado a aplicar la ley y ha reiterado que se necesita "sosiego" para reconducir la negociación.
Todos los mandos de la Policía Foral de Navarra, excepto tres, presentaron la pasada semana su dimisión como jefes de unidad en protesta por la nueva Ley de Policías, que modifica las retribuciones en el cuerpo.
Las dimisiones se han presentado tras las reuniones deliberatorias que los mandos han mantenido.
La consejera de Interior, María José Beaumont, ha afirmado, ante la presentación de dimisión de 30 mandos de la Policía Foral por su desacuerdo con la Ley de Policías, que el Gobierno no acepta "chantajes" y ha remarcado que "no puede más que cumplir la ley, lo contrario sería prevaricar" y "eso es delito".
Tras precisar que "las dimisiones no entran en la normativa de Policía Foral", la consejera ha querido transmitir un mensaje de "tranquilidad" respecto al funcionamiento de los servicios de seguridad ciudadana, porque, según ha remarcado, el Gobierno no duda "de la responsabilidad de los mandos".
La consejera ha analizado la situación generada en la Policía Foral con la decisión de 30 de sus 33 mandos en una rueda de prensa, en la que ha estado acompañada por el director general de Interior, Agustín Gastaminza, y el jefe de la Policía Foral, Torcuato Muñoz.
En su intervención ha querido dejar claro que ni ella, como ha pedido UPN, ni quienes le acompañaban en ese momento tienen intención de dimitir por esta cuestión que, tal y como ha reconocido Muñoz, crea "malestar" y "enrarece el ambiente", si bien ha precisado que "esto viene de atrás, el origen fue la modificación de la ley".
Beaumont ha confirmado que a las 12:27 horas "treinta miembros de la Policía Foral han presentado lo que ellos llaman dimisión de sus cargos" porque "la dimisión no es posible, no está contemplada en el reglamento de Policía Foral", a lo que Muñoz ha añadido que "no tienen sentido", así como que "no se van a aceptar esas dimisiones".
En el escrito los jefes de las unidades operativas de Policía Foral, inspectores y comisarios manifiestan su "total desacuerdo" con la Ley Foral de Policías y con el Decreto de Policía Foral que "el Gobierno va a aprobar porque debe hacerlo", ha subrayado.
Los mandos, según ha explicado la consejera, refieren que "el régimen de horarios y retribuciones previsto significa una fractura dentro de Policía Foral" que dicen "va a afectar a la prestación del servicio en materia de seguridad", por lo que ante "la imposibilidad de gestión de las unidades" presentan sus dimisiones.
Tras mostrar su "más absoluto respeto por el desacuerdo" de los mandos con el contenido de la ley, ha remarcado que el Gobierno "tiene el deber de cumplir la ley, es lo que ha venido haciendo y va a hacer con la aprobación del Decreto Foral en materia de jornadas y retribuciones".
La consejera ha remarcado que desde febrero un grupo de trabajo técnico trabaja en la elaboración de ese decreto y ha remarcado que en ese proceso está teniendo participación activa todos los miembros de la Policía Foral.
Ha reconocido que el proceso "está siendo complejo, pero garantiza el cumplimiento de la ley la participación de los miembros de la Policía Foral".
El plazo de presentación de alegaciones termina el sábado día 3 por lo que "no hay nada definitivo", ha aseverado la consejera, quien ha comentado que esa es la razón por la que había cerrado una cita para el próximo lunes día 5 con una representación de los mandos con el fin de conocer su postura e informarles del proceso.
Al tiempo de presentar su dimisión los mandos han anunciado que varios de ellos acudirán a esa reunión. La posibilidad de que haya cambios en el proyecto dependerá de las alegaciones que todavía se están presentando, ha indicado.
Después de asegurar que el Gobierno no van a permitir "maniobras de última hora ni chantajes", ha apuntado que la ley en vigor es "manifiestamente mejorable", pero para todo ello "hace falta tiempo, consenso sindical y político, sosiego y tranquilidad", algo que ha dicho que espera que haya para así poder reconducir esta situación.
La dimisión de los mandos -todos excepto el comisario principal, un comisario y un inspector interino- implica que "este fin de semana ya no habrá jefes de unidad" en todo el cuerpo de la Policía Foral.
La nueva Ley de Policías fue aprobada por el Parlamento foral en la pasada legislatura pero no entrará en vigor hasta el próximo 1 de octubre. Previamente, el actual Gobierno de Navarra deberá aprobar el decreto que la desarrolla, cuyo borrador ha causado las dimisiones por las nuevas tablas retributivas que establece.
En concreto, el borrador fija que un total de 256 policías verán rebajado su sueldo mientras que unos 700 lo verán aumentado.
Juantxo Zabalza, presidente de la Agrupación Profesional de Policía Foral, ha explicado que las razones de las dimisiones "son la regulación de las retribuciones y horarios de la Ley Foral de Policías de Navarra" y el borrador de decreto foral que les han trasladado, "con la bajada de salario a muchos compañeros y la dificultad para gestionar a partir de ahora esas unidades, todas excepto tres".
"Nos han remitido una serie de tablas de retribuciones donde muchos compañeros pierden mucho dinero, 3.000, 4.000 euros... Auténticas barbaridades después de la pérdida de poder adquisitivo que hemos tenido en los últimos años", ha agregado.
Los mandos, ha narrado Zabalza, se quejan también del sistema de horarios, de las jornadas que se va a establecer, porque creen que "hay dificultades para gestionar las unidades".
"Ya vienen avisando -ha recordado-. En su día, a la comisión de Interior, al Parlamento de Navarra, plantearon la imposibilidad de trabajar con ese sistema y su posicionamiento en contra de las retribuciones, y ahora han dado un paso adelante, han dimitido".
El presidente de la agrupación cree que la decisión "deja a la Policía Foral de Navarra en una situación ingobernable", al tiempo que ha subrayado que "el Gobierno no tiene otro remedio que admitir sus dimisiones, porque esos puestos son voluntarios".