Arturo y Peque empatan en el San Casto

Salamanca

La vuelta de Peque al San Casto dejó caras sonrientes en su equipo, el Peñaranda, al final del partido, mientras que Arturo y los suyos mostraban rostros largos, propios de un partido empatado en el minuto 86 por parte de los visitantes, que en la segunda mitad tuvieron más oportunidades y, al menos desde la grada, también daba la impresión de que buscaban con más ganas el gol de la igualada, ante un Santa Marta defensivo que buscó asegurarse los tres puntos tras el gol en la primera mitad de Ramajo, que aprovechó una pelota muerta y consiguió batir a Álvaro, el meta de los morados.

 Antes del primer gol, en el minuto 27 de partido, el Santa Marta tuvo varias ocasiones sobre todo a través de las acciones de Martiña, el mejor de su equipo en la primera mitad, activo por la banda y buscando permanentemente probar a la defensa de Peque. Tras el gol, intentó achuchar el conjunto de Bracamonte a través, sobre todo, de Raúl. El jugador, de lo más destacado en el bando visitante, estuvo permanentemente buscando la espalda a la defensa de Arturo Martín, y en algunos momentos consiguió superarla, como en el minuto 30 de partido, momento en el que el Peñaranda incluso reclamó penalti en una doble acción de peligro. En el 42, el árbitro no supo interpretar una acción de ataque en el área del Peñaranda, e interpretó finalmente fuera de juego, aunque previamente señaló penalti. El desconcierto en jugadores y grada era importante, pero tras esto se llegó al descanso con la ventaja local.

En el segundo tiempo, Rubio ingresó en el terreno de juego por Cascón sin que hubiera un claro dominador, aunque el cariz del partido se fue postulando hacia un mayor empuje del Peñaranda en busca del gol ante el nulo acierto en ataque del Santa Marta, que apenas gozó de ocasiones en el segundo parcial. El Peñaranda obligó a Manu a emplearse a fondo en una acción a la salida de un córner, y siguió mordiendo hasta que en el 86 obtuvo el premio del empate, obra de Dela. Reparto de puntos que motivó el disgusto del míster local, Arturo Martín, al terminar el partido y que recogieron los micrófonos de la SER.