Que se cumpla la Ley Integral Contra la Violencia de Género

Palencia

La Ley integral contra la violencia de género, aprobada el 28 de diciembre de 2004, fue la primera gran Ley de ampliación de derechos en España en el período 2004-2011; a partir de ahí vinieron los recortes.

La violencia de género se manifiesta como el símbolo más brutal de la desigualdad existente en nuestra sociedad y es la ejercida por los hombres sobre sus cónyuges, parejas o exparejas; este es el objeto de la Ley y no otros.

Tuve el gran honor de ser ponente de esta Ley en el Congreso de los Diputados y de colaborar a que se aprobara por unanimidad; el Partido Popular votó a favor, de mala gana y a última hora, porque nunca creyó en la Ley, como luego se ha demostrado con su aplicación.

Esta Ley ha recibido un premio de la ONU y las organizaciones internacionales la reconocen como una de las mejores del mundo, para luchar contra la violencia hacia las mujeres. Es pionera y ha sido ejemplo para otros países del mundo desarrollado.

La Ley es integral porque recoge todo tipo de medidas: de prevención y educación, desde la escuela…, de atención y protección a las víctimas…, de servicios sociales integrales…, de medidas económicas, laborales y de Seguridad Social…, de medidas sanitarias y de apoyo asistencial…, “es decir: se recogen medidas de prevención, protección y ayuda a las víctimas y también tutela judicial con la creación de los Juzgados de Violencia contra la Mujer”

El grave problema sigue existiendo, la violencia continúa y los asesinatos también.

La respuesta suele limitarse a decir que “es necesario un pacto de estado contra la violencia de género”.

Mi opinión: esto es claramente insuficiente. Creo que el mejor pacto de estado es acabar con los recortes y aplicar la Ley integral que tenemos, pionera y valorada en todo el mundo… Que se aumenten los medios personales y materiales para su aplicación eficaz, que se apliquen las medidas de educación y prevención… y el conjunto de medidas de atención y protección… Que cesen los recortes del Gobierno para la aplicación de la Ley… y que se demuestre que la lucha contra esta lacra vuelve a ser una prioridad.

Finalmente, para conseguir el éxito es necesario que la conciencia colectiva haga suyo que esta batalla será larga y que solo se ganará si también conseguimos la colaboración activa del conjunto de los ciudadanos.