Culpable de asesinato con alevosía y parentesco
El jurado popular ha declarado a Benito Quintairos culpable del doble asesinato de su mujer y su suegra en diciembre de 2014 en Abadiño
Bilbao
El jurado popular ha declarado culpable de doble asesinato con los agravantes de alevosía y parentesco a Benito Quintairos, que mató a su mujer y a su suegra en el domicilio familiar de Abadiño (Bizkaia).
El jurado ha leído su veredicto tomado por unanimidad tras dos días de deliberaciones. Además de los dos delitos de asesinato, el jurado le considera también culpable de un delito de daños por los desperfectos que ocasionó en su taller.
Los hechos ocurrieron el 10 de diciembre de 2014 cuando el acusado golpeó en la cabeza y posteriormente asfixió en primer lugar a su esposa y después a su suegra.
Más tarde se dirigió a su empresa, un taller de carpintería de madera y aluminio ubicado en Atxondo, y tras prender fuego al local se colgó boca abajo con ayuda de un montacargas, con lo que, según las acusaciones, Quintairos pretendía simular un asalto y utilizarlo como coartada de los crímenes.
Durante la vista oral de este caso, Quintairos confesó su culpabilidad, pero negó, sin embargo, que hubiera planeado los hechos, que atribuyó a un arrebato, y aseguró que lo sucedido en la carpintería respondía a que intentó suicidarse.
El jurado no ha creído esta versión, que supondría una condena por homicidio y menos años de prisión, y ha considerado, tal y como mantenían las acusaciones, que se trató de un asesinato.
Una vez leído el veredicto, las diferentes partes personadas en este caso han intervenido para solicitar las penas de cárcel en sintonía con lo decidido por el jurado.
El Ministerio Fiscal ha solicitado un total de 43 años de prisión: veinte por cada asesinato y tres por los daños en el taller.
La Fiscalía ha pedido también que Quintairos no pueda acceder al tercer grado penitenciario hasta que cumpla la mitad de la pena.
El abogado del Estado, presente en la causa por tratarse de un caso de violencia machista, se ha sumado a la petición del fiscal y ha instado a la juez a que, en la ejecución de la pena, se le apliquen los beneficios penitenciarios sobre la suma total de la condena y no sobre el límite máximo del cumplimiento.
La acusación particular, en representación de la familia, y la Acción Popular se han pronunciado en el mismo sentido que la Fiscalía y la Abogacía del Estado.
La acusación particular ha pedido también una indemnización de 150.000 euros para el hijo del acusado y de 25.000 euros para cada uno de los seis hermanos e hijos de las dos víctimas.
La defensa, que pedía una condena de 10 años por cada homicidio, ha pedido tras conocer el veredicto que se le imponga a su cliente la pena de prisión que le corresponde por asesinato, pero en su grado mínimo.
También ha pedido el grado mínimo de la pena por daños y una rebaja en la indemnización pedida para los familiares.
La magistrada decidirá en la sentencia la fijación de la cuantía de las indemnizaciones, así como la responsabilidad civil por los daños causados en el incendio.