El concello de O Porriño achaca al urbanismo y el conflicto laboral la posible marcha de Frigolouro
La alcaldesa, que se enteró por el comunicado de la intención de Coren de trasladar la planta del municipio, cree que buscan trabajadores en condiciones de semiesclavitud
La cárnica está situada en pleno casco urbano de O Porriño. / Google Maps
Vigo
Frigolouro, instalada en O Porriño, amenaza con irse a Portugal para abaratar costes. La empresa tiene medio millar de trabajadores entre personal propio y subcontratado.
La idea era ya el traslado de esta industria instalada en el centro del municipio pero a uno de los múltiples polígonos industriales de O Porriño.
Para ello el concello de O Porriño les había planteado firmar un convenio en el que, nos explican fuentes municipales, la empresa quería condiciones ventajosas con la recalificación de los terrenos donde en estos momentos se sitúa , en pleno casco urbano. La alcaldesa del municipio no descarta que este órdago se deba a un pulso en este asunto pero también apunta a los conflictos laborales en el interior de la la empresa con trabajadores que han denunciado estar contratados como autónomos encubiertos.
La alcaldesa explica que en su día pidieron una reunión para hablar de la situación de los trabajadores porque a su entender la empresa “no respeta sus derechos utilizando de forma torticera la legislación laboral”, y entiende que ahora lo que intentan es buscarlos aún más baratos en otros países, “dificil salvo que encuentren personas que quieran trabajar en situaciones de semi esclavitud”, explica Eva García de la Torre, extrañada porque la primera noticia que ha tenido de la intención de la empresa de trasladarse a Portugal ha sido por los medios de comunicación después de que el gerente de la planta enviase un comunicado. Reconoce también la regidora que en la única reunión que mantuvo con la empresa “
Querían un convenio urbanístico para cambiar la ubicación del dentro del municipio a uno de los polígonos” y recuerda que en su día el concello de O Porriño cedió los terrenos a la empresa, en la actualidad del grupo Coren, de forma gratuíta aunque con la condición de que permitieran a los carniceros de la zona sacrificar las reses en estas instalaciones y se contratase un porcentaje mínimo de personal del municipio.”
