Gustavo García: "Espero seguir dando mucha guerra"
Se jubila el director de Casa Amparo y del Albergue municipal. Reivindica el humor en el ámbito social.
Gustavo García, una de las referencias de la acción social municipal / Esther Orera
Zaragoza
El próximo 25 de diciembre, Gustavo García dejará de ser el director del Albergue municipal y de la Casa de Amparo, dos de las referencias de la acción social municipal. Ha decidido jubilarse antes de los 65 años pero es "porque llevo una actividad militante muy intensa y no me daba tiempo". Ambos centros son "emblemáticos y requieren tiempo", afirmaba García en el espacio Gente Maravillosa, de Hoy por Hoy Zaragoza.
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Gustavo García: 'Espero seguir dando mucha guerra' - Gente Maravillosa (07/11/2016)
Al ámbito social llegó por la lucha política y sindical del tardofranquismo, cuando se mete "en bastantes jaleos, juicios, duermo en comisaría..." En el campo social, asegura, "si no tomas el humor como referencia, estás perdido porque es un ámbito complejo, somos convivencia, somos consciencia".
Ahora, en 2016, "no estoy cansado". Tampoco entiende que un profesional de servicios sociales pueda "estar quemado". Es "como si un cirujano tuviera Párkinson: podrá ser muy buena persona pero yo no me pondría en sus manos". Gustavo García argumente que "si estás desmotivado, ¿cómo vas a motivar a alguien?". Por eso, remarca: "No me retiro, espero seguir dando mucha guerra; tengo mil historias".
Como la Asociación Estatal de directores y gerentes de Servicios Sociales, con 24 años de funcionamiento, de la que él fue uno de sus fundadores; una asociación, recuerda "que no nació para ser reivindicativa sino para liderar procesos de mejora e innovación". Sin embargo, la crisis ha hecho que se convierta "en un núcleo duro de resistencia", como las campañas contra el frío en invierno o la falta de plazas asistenciales.
Esta asociación elabora el Informe sobre el Estado Social de la nación. Precisamente critica que en España se debata sobre economía pero no sobre problemas de la sociedad, que "parecen problemas colaterales" Insiste en que "la economía está en función de la sociedad y no al revés".
Este pionero de los Servicios Sociales entró en el Ayuntamiento de Zaragoza como peón de Montes en 1971. Posteriormente, fue auxiliar administrativo y fue el primer hombre con carnet de "asistenta social", una carrera "moderna, femenina y arriesgada", recuerda. "No me digas que no era como para hacerla".
