Una de las víctimas del pederasta de Ciudad Lineal aún tiene pesadillas
La madre de la menor ha comparecido este martes en la Audiencia Provincial de Madrid
Madrid
La segunda víctima del pederasta de Ciudad Lineal sigue teniendo pesadillas. Y han pasado dos años de la agresión. Es uno de los detalles que ha trascendido de la declaración de la madre de la menor que ha comparecido este martes en la Audiencia Provincial de Madrid a puerta cerrada. También ha explicado que la niña recibió durante los tres meses posteriores a la agresión un tratamiento médico profiláctico -tres pastillas al día- para evitar enfermedades venéreas que le provocaron fuertes efectos secundarios. La pediatra que la atendió ha confirmado además, según apuntan fuentes jurídicas, que todas las víctimas tuvieron que recibir un tratamiento similar porque así lo establece el protocolo.
Además de la madre de la menor, también ha prestado declaración el hombre que se la encontró en la calle después de la agresión, en torno a la una de la madrugada, en la calle Alcalá: "Me encontré a una niña caminando y llorando. Le pregunté qué le pasaba y me dijo que su madre estaba en el Metro. No podía articular palabra".
Según el testimonio de varios policías judiciales, que también han comparecido durante la sesión, la descripción que esta niña, de 9 años, hizo del piso de Santa Virgilia fue clave para estrechar el cerco sobre Antonio A. Ortiz. "Era una menor muy especial. Todo lo que decía era calcado", ha asegurado un agente. En esa casa aparecieron restos de vómito de la menor y una huella palmar en el colchón. También se encontró semen del acusado.
En el juicio ha comparecido además un agente de la policía nacional que atendió a la tercera víctima de Ortiz. Ha relatado que se encontró a la menor con el pelo "mojado" y que ésta le confirmó que se había duchado y que no lo había hecho sola. "La mujer que estaba con ella me dijo que le había manifestado que un varón amigo malo la había dejado allí".
Ortiz se enfrenta a una petición de la Fiscalía de 77 años de cárcel por abusar sexualmente de cuatro menores en el distrito de Ciudad Lineal. Lleva dos años en prisión preventiva.