Izquierda

Palma de Mallorca

En Socialistes Independents de Lloseta se preguntan si el hecho de que la izquierda ande siempre dividida se debe a su diversidad congénita o es simple y puro cainismo. Y en busca de respuestas, organizaron anoche una mesa redonda con Laura Camargo, de Podemos, Sarah Alonso, del PSOE, David Abril, de Més y Juanjo Martínez, de Esquerra Unida.

Se habló de qué significa ser de izquierdas en estos tiempos líquidos. Hubo debate sobre si es exportable o no la fórmula del govern balear. Se discutió sobre virtudes y algunos vicios orgánicos de los partidos y se definieron culpas y responsabilidades. Se reconocieron personalismos y miserias humanas y se apostó por un futuro en el que la izquierda sepa conectar con aquellos que buscan pero no encuentran, como dijo el maestro Ramoneda.

Los cuatro ponentes han vivido y viven luchas cainitas en sus partidos. Qué les voy a contar. Pero todos ellos coincidieron en una cosa: el enemigo no está en casa. El enemigo son las políticas reaccionarias que destruyen conquistas sociales conseguidas gracias al esfuerzo de muchos.

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Saben que el enemigo está ahí fuera. Y que muerde. Conviene que no lo olviden. Que no lo olvidemos.