Una legislatura entre delfines

Santiago de Compostela

Feijoo no quiere ni oír hablar de su sucesión. Ésta será, si nada cambia, su última legislatura como presidente de la Xunta. De hecho, la actual es una legislatura de descuento. Él siempre había dicho que sería presidente durante dos mandatos.

Al final, incumplió su palabra, se presentó a la reelección, y ganó. Hasta aquí la historia es conocida. Las dudas surgen en lo que está por venir. Cualquier gesto, cualquier movimiento del presidente se interpretará a partir de ahora en clave sucesoria. Es inevitable.

Feijoo no ha querido dar pistas al nombrar gobierno. Todo sigue igual, Rueda es el único vicepresidente. Ahora Feijoo analiza qué conselleiros mantendrán su acta de diputado y ahí puede desvelar alguna pista más.

Aunque este jueves ha dicho que su decisión en ese sentido no se debería leerse en clave sucesoria. Feijoo quiere sacudirse de encima un debate que, por mucho que le pese, lo acompañará toda esta legislatura. Será, para Feijoo, una legislatura entre delfines.

Nombramientos

Feijoo cierra la estructura provincial de su gobierno. Continúan como delegados territoriales de la Xunta Marisol Díaz en Ourense, Ignacio López Chaves en Vigo y Cores Tourís en Pontevedra. Hay cambios en A Coruña y en Lugo.

En A Coruña, Ovidio Rodeiro, hasta ahora alcalde de Boqueixón, es el nuevo delegado territorial. En Lugo, José Manuel Balseiro sustituye a Raquel Arias, que ahora es secretaria de la mesa del Parlamento. Se han intercambiado los puestos.

Además, Feijoo mantiene como diretor xeral de su gabinete a Álvaro Pérez, y cesa como secretario xeral para o deporte Xosé Ramón Lete. Varias fuentes lo sitúan como presidente del consejo superior de deportes.