Victoria agónica y balsámica ante el Valladolid
Un gol de Manu del Moral en el 90 da el triunfo a los rojillos, que volvieron a ver cómo les empataban tras adelantarse
Soria
Por fin, después de siete jornadas sin hacerlo, el Numancia saboreó un triunfo que legó casi sobre la bocina, gracias al gol de Manu del Moral, ante un Real Valladolid que puso en apuros a los rojillos. Por no perder la costumbre, el cuadro soriano se adelantó en el marcador en una buena primera parte, pero vio cómo en la segunda igualaba el cuadro pucelano. La recta final fue una apuesta de casta y pundonor del Numancia, que esta vez sí tuvo premio.
Los primeros minutos fueron claramente rojillos, con dominio y empuje hacia la portería visitante. Íñigo Pérez, con un disparo que se marchó alto y dos balones colgados al área por Julio Álvarez, en sendos lanzamientos de falta, dejaban a las claras las intenciones del Numancia. El cuadro local se mostraba cómodo, con la posesión del balón, combinando y triangulando en el centro del campo. A los once minutos, Pablo Valcarce firmó la jugada del partido. Arrancó desde la banda derecha hasta la frontal del área, desde donde soltó un zurdazo que se coló raso junto al poste izquierdo de Becerra. Un gran gol para dar un punto de serenidad a los sorianos y espolear un poco a los pucelanos, que reaccionaron y empezaron a apretar, pero sin llegar con claridad al área de Aitor Fernández. El partido entró en una fase de igualdad y lucha en la medular, pero con pocos acercamientos claros a las porterías, salvo algún centro desde los costados. Ya en la recta final, Manu del Moral remató de cabeza, blandito, a las manos de Becerra, y en el lado opuesto, Callens despejó a córner in extremis un pase al área de Joan Jordán.
- FICHA TÉCNICA
Tras el descanso, el técnico visitante reforzó la banda izquierda con la entrada de Ángel (un lateral) por el extremo Ibán Salvador. Y poco después tuvo que retirar al capitán Rafa, lesionado. Peor se le pudieron poner las cosas al Valladolid si Manu del Moral hubiera estado más acertado dentro del área con un remate muy desviado tras una buena pared con Julio Álvarez. Y por no faltar a la ‘tradición’ este curso, el Numancia bajó el pistón. El Valladolid lo aprovechó y empezó a achuchar a los rojillos, a los que les empezó a costar seguir el ritmo del primer tiempo. En una internada por el costado izquierdo, la defensa rojilla no estuvo inspirada y el balón acabó a los pies de Raúl de Tomás, que dentro del área recortó y batió a Aitor Fernández. El gol fue una losa para los numantinos, que tardaron en reaccionar. Mata tuvo dos ocasiones pero en la primera Aitor desvió al larguero su remate a bocajarro y en la segunda el esférico se fue rozando la escuadra. Gracias a los cambios, en los últimos diez minutos, lo lograron, tirando de casta y pundonor. Así, en un balón al área que parecía franco para los zagueros, Manu del Moral porfió, se hizo con él y fusiló a Becerra para delirio de la afición, que casi dos meses después, pudo por fin celebrar una victoria.