En apoyo de los Servicios Sociales municipales

Alicante

Mucho hemos hablado estos días sobre ayudas para paliar la pobreza energética a raíz de la muerte de la anciana de 81 años que murió en el incendio de su casa iluminada por velas al tener cortada la luz eléctrica en Reus.

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Sin embargo, entre el torbellino de informaciones que hemos tenido, nadie ha mencionado un hecho, en mi opinión fundamental, que con la excusa de la dichosa crisis se viene realizando en España para cambiar en profundidad el modelo de atención social que hay en España y convertirlo en caridad asistencial.

Miren ustedes: todos los ayuntamientos de España comparten un programa llamado Plan Concertado de Prestaciones Básicas de Servicios Sociales, donde se financian entre otras muchas cosas las ayudas básicas y de emergencia que dan los servicios sociales municipales. Pues bien, en el año 2008 todos los ayuntamientos de España recibían del Ministerio de Asuntos Sociales para estas ayudas básicas 95 millones de euros, mientras que en 2015 este Plan se recortó un 70% por parte del Ministerio, reduciéndose hasta los 27 millones de euros, precisamente cuando más falta hacía por los efectos devastadores de la crisis social que vivimos.

Sin embargo, el mismo Ministerio de Asuntos Sociales que ha recortado 67 millones de euros a los ayuntamientos, concede a dos grandes ONG 67 millones de euros en subvención para dar ayudas sociales a la población más necesitada.

Es decir, desde el Gobierno se está reduciendo al máximo la capacidad de acción de los servicios sociales municipales que tienen competencias, profesionales y capacidades especializadas para atender las necesidades sociales mientras que se refuerza y financia con el dinero que se quita a los ayuntamientos a ONG asistenciales. Todo ello supone cambiar los derechos por caridad, y las organizaciones públicas por organizaciones de pobres.

Esto es algo muy importante a la hora de entender lo que está ocurriendo en España.

@carlosgomezgil