PNV y PSE apuestan por un final ordenado de ETA y por hacer un borrador de Estatuto
El acuerdo para el nuevo Gobierno Vasco formado por PNV y PSE apuesta por un "final ordenado" de ETA y se compromete a crear un borrador de un nuevo Estatuto de Autonomía en un plazo de ocho meses

EAJ / PNV

Bilbao
El acuerdo para el nuevo Gobierno Vasco formado por PNV y PSE apuesta por un "final ordenado" de ETA y el acercamiento de los presos de la banda terrorista al País Vasco, e insta a la transferencia de la competencia de centros penitenciarios.
El tercer punto de los cuatro del acuerdo PNV-PSE es el dedicado a "La convivencia y los derechos humanos", un asunto en el que el objetivo será "consolidar sólidamente la paz y la normalización de la convivencia y contribuir, para ello, también en la materialización del fin definitivo de ETA".
Respecto al "final ordenado de la violencia", el pacto apuesta por el apoyo a "la verificación de un calendario de desarme definitivo, que previamente incluya una declaración de ETA sobre su carácter irreversible e incondicional, como expresión de su voluntad de disolución".
Además, incluye una "propuesta de reorientación de la política penitenciaria que fije como objetivo fundamental la reinserción, atienda prioritariamente las problemáticas de mayor incidencia humanitaria y favorezca el acercamiento de presos" al País Vasco.
El acuerdo de gobierno entre el PNV y el PSE-EE incluye también que la ponencia creada en el Parlamento vasco hará un borrador de un nuevo Estatuto de Autonomía en un plazo de ocho meses.
El apartado de autogobierno, que ocupa 10 de las 71 páginas del texto pactado, reconoce a los dos socios la "libertad para defender" en la ponencia de autogobierno sus "respectivos postulados y planteamientos en materia de autogobierno".
En el texto pactado, nacionalistas y socialistas no concretan una posición común sobre esta materia y solo mencionan las cuestiones que se debatirán en el Parlamento, como el "reconocimiento de Euskadi como nación" o el "reconocimiento del derecho a decidir del Pueblo Vasco y su ejercicio pactado en un marco de negociación y acuerdo dentro del ordenamiento jurídico vigentes en cada momento".
PNV y PSE-EE cifran en 35 las competencias y funciones no transferidas, incluidas las de prisiones y la gestión de la Seguridad Social sin romper la "caja única".
El PNV y el PSE-EE sitúan el empleo como su "prioridad" en el pacto de gobierno que han alcanzado en Euskadi, en el que también apuestan por actualizar el Concierto Económico, con una nueva Ley Quinquenal del Cupo, y anuncian que plantearán la transferencia del régimen económico de la Seguridad Social.
El empleo como prioridad
En el apartado del acuerdo dedicado al "empleo, la reactivación y la sostenibilidad", ambos partidos señalan que el empleo es "el eje básico de la actuación política del conjunto del Gobierno" con el fin de reducir el paro por debajo del 10 %.
Con dicho fin, PNV y PSE-EE apuestan por reformar el servicio vasco de empleo Lanbide, dar prioridad a políticas que favorezcan el empleo de colectivos con especiales dificultades de inserción laboral (como jóvenes, mayores de 45 años, parados de larga duración o mujeres) y consolidar el marco de diálogo social con patronal y sindicatos, entre otras actuaciones.
Ambas formaciones se comprometen a mantener el objetivo del déficit público que corresponde a Euskadi y muestran su defensa del Concierto Económico y su aspiración de alcanzar un acuerdo con el Estado para las liquidaciones pendientes de los cupos correspondientes al quinquenio 2007-2011 y la liquidación definitiva de los provisionales correspondientes al período 2012-2015.
También pretenden promover los acuerdos pertinentes para la aprobación de una Ley Quinquenal de metodología de señalamiento del Cupo.
Asimismo, plantearán al Estado la transferencia de la gestión del régimen económico de la Seguridad Social y la negociación de los correspondientes convenios que la regulen, "desde el respeto al principio de solidaridad y al carácter unitario del sistema", según puntualizan.




