Huertas se queda sin partido
Por primera vez, el Parlament no está presidido por ningún partido, porque Xelo Huertas ha sido expulsada de Podemos a falta de la reválida de Madrid

'La línea roja' de Matías Vallés (07/12/16)
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Palma de Mallorca
Nada puede sorprendernos en la política balear. O casi.
Por primera vez, el Parlament no está presidido por ningún partido, porque Xelo Huertas ha sido expulsada de Podemos a falta de la reválida de Madrid.
Un partido en su sano juicio no hubiera renunciado voluntariamente al puesto de mayor nivel ocupado por Podemos en toda España.
El partido de Iglesias demuestra que no le mueven los cargos. Como mínimo, los cargos de los demás.
La expulsión recurrible en cadena del empresario Daniel Bachiller, la presidenta Huertas y la diputada Montse Seijas obliga a evaluar los daños.
Las pruebas aportadas hasta la fecha demuestran que Bachiller, que ni siquiera es diputado, ha intervenido con intensidad para preservar su laboratorio en las cuentas del Govern. Es incompatible con la formación.
Huertas se sintió arrebatada por Bachiller, pugnó entre bastidores por su mantenimiento y amenazó con oponerse a los Presupuestos en un chat interno. En otro partido no sería amonestada, sino felicitada.
En cuanto a Seijas, su único crimen fue investigar los lazos de Alberto Jarabo con IB3. No hay motivo para la expulsión, pero tampoco la diputada menorquina ha sustanciado las acusaciones contra su exlíder.
Las turbulencias de Podemos, típicas de un partido en erupción permanente, demuestran que las heridas leves también pueden ser mortales.




