La bola de la Marina, la bola de la Navidad

A Coruña

Esa bola enorme, llena de luces, plantada en mitad de La Marina, es el ejemplo de un cambio de chip. Anuncia una Navidad redonda aunque a unos metros de ella, en María Pita, en la "Casa dos xoguetes" creada por el gobierno local, solamente en la primera tarde de actividad 180 familias se apuntaron porque necesitan juguetes para sus niñas y sus niños y no los pueden comprar. Al lado del poblado navideño de María Pita, el de Negreira, el poblado lapón, éxito total entre las familias con niños. La bola gusta a todos. A los que pasean en un espacio urbano libre de coches que necesita llenarse, a los que fueron a pedir juguetes, a los que van al parque infantil que se mantuvo con acierto como barrera ante el cemento, a los que defienden el museo de la automoción. La bola habla de políticas para todos, para los que necesitan que les sostengamos, ciudadanos de derecho, y a los que tenemos la obligación de sostenerlos. Y así debe ser la política municipal, para todos. La bola es el punto de la Navidad. Nos hace sentirnos como los niños cuando les compramos un árbol grande que casi no cabe en el salón. La bola tiene el magnetismo de las buenas noticias. Y es que trae la buena noticia, empieza la Navidad.

Lo que hace la luz...