El circuito como banco de prueba para pilotos noveles de la Fórmula V8 3.5

Jerez de la Frontera

Durante tres días, los potentes monoplazas de la Fórmula V8 3.5 han entrenado en el Circuito de Jerez en unos test donde participaron un total de seis escuderías. El objetivo era, por un lado trabajar con los veinte pilotos desplazados a Jerez y las mecánicas de cara a la próxima temporada, y por otro, llevar a cabo pruebas a jóvenes valores, lo que se le conoce como un “rookie test”.

A lo largo de estos tres días fueron varios los pilotos noveles que tomaron el volante de los V8 para realizar sus primeras tomas de contacto con estos monoplazas de más de 500 caballos de potencia.

Las sesiones constaban de dos mangas cada día, una por la mañana y otra por la tarde. El primer día con una pista muy resbaladiza por las lluvias caídas durante el día anterior, el más rápido de la tanda matinal fue el mejicano Alfonso Celis que marcaba un tiempo de 1.31.379 que por la tarde, ya con la pista más seca, lo rebajaba el italiano Damiano Fioravanti que marcaba una mejor vuelta de 1.28.607. El segundo día era el brasileño Pietro Fitipaldi (Lotus), quien se erigía en el más veloz de la sesión de mañana al marcar un crono de 1.27.416 que a su vez lograba rebajar el mismo en la sesión de tarde para establecer un tiempo de 1.27.392. Por último, la tercera y última sesión celebrada con unas condiciones inmejorables de temperatura, tuvo algunas altas importantes, caso del español Alex Palou (Teo Martín), que al final fue el protagonista indiscutible de estos test al marcar durante la sesión de tarde un tiempo de 1.26.668.