Alessandro Marinelli le pone voz a la inacción de la Ley de Dependencia
Marinelli padece paraplejia y tiene reconocida una discapacidad del 89 por ciento. Hace 4 años le retiraron la ayuda a la dependencia

Alessandro Marinelli le pone voz a la inacción de la Ley de Dependencia
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Palma de Mallorca
Alessandro Marinelli, tiene 38 años y padece una paraplejia que le afecta a toda la movilidad de las extremidades inferiores. Tiene una discapacidad reconocida del 89 por ciento.
Hace nueve años, un accidente de tráfico "le cambió la vida". Antes de sufrir el accidente trabajaba como fotógrafo en Valencia y tenía previsto viajar a Estados Unidos para seguir creciendo profesionalmente. De la noche a la mañana, "te cambia la vida, tienes que replantearte tus objetivos y empezar de cero".
El testimonio de Alessandro nos muestra una historia de superación personal y le pone voz y rostro a una "ineficaz" Ley de Dependencia.
Tiene reconocida una gran invalidez por la que recibe un pensión y que le obliga a contar con un cuidador o asistente personal. Tras solicitar ayudas a través de la Ley de Dependencia fue considerado "apto" para poder beneficiarse de la subvención asociada a esta ley.
Seis años después de su puesta en marcha, en julio de 2012, el Gobierno de Mariano Rajoy aprueba un Real Decreto por el que se endurecen los criterios de acceso a esta norma. Muchos dependientes se quedaron sin ayuda o vieron mermada su retribución. A Alessandro le "retiran" la ayuda a pesar de tener la consideración de gran dependiente. El Gobierno considera que la ayuda a la dependencia va incluida en su pensión. "Estuve cobrando durante cuatro años una ayuda de 380 euros que después el Gobierno me retiró al considerarla incompatible con mi pensión", un incompatibilidad que "no se aplica" en otras Comunidades Autónomas.
Actualmente, cobra 1.100 euros de pensión y 800 euros, van destinados al sueldo de su cuidador. "Necesito buscar otros recursos económicos, no llego a fin de mes", reconoce. La ley de Dependencia le excluye y también el mercado laboral, "si vuelvo a practicar la misma actividad económica previa al accidente, me retiran la pensión".
Lamenta no poder "plantearse volver al mercado laboral" porque su situación actual le "impide" desarrollar una jornada laboral completa y se arriesga a "perder la pensión" por una empleo de 3 o 4 horas diarias.
Se cumplen 10 años desde la puesta en marcha de la Ley de Dependencia, una norma que, para Alessandro, es una "buena idea" sobre la que había puestas muchas expectativas que fueron menguando desde el momento de su aprobación. Una norma "necesaria y mal ejecutada".
El accidente le cambió la vida, sus objetivos. Actualmente está volcado en mejorar su calidad de vida a través del deporte y la cooperación.
"Queda mucho por hacer", reconoce. La ayuda económica es "imprescindible" para mejorar la calidad de vida de las personas con discapacidad y el primer paso es un "cambio de conciencia" para romper no solo las barreras arquitectónicas y económicas sino también las barreras sociales.




