La Comunidad contempla el derribo del 75% de las viviendas de la Cañada Real

Madrid

Durante dos meses, técnicos y arquitectos, se han dedicado a elaborar un minucioso estudio para cotejar cada uno de los metros cuadrados que forman el terreno de la Cañada Real. Ese informe – encargado por el comisionado de la Comunidad de Madrid- ha servido para evaluar y cuantificar qué cantidad del terreno de la Cañada Real se salvaría de las demoliciones. La conclusión de ese informe se ha conocido este viernes. “El 75% de las viviendas no se pueden quedar donde están”, según ha adelantado el comisionado de la Cañada Real de la Comunidad de Madrid, José Antonio Martínez Páramo. No pueden continuar allí porque esos pisos estarían afectados por una serie de limitaciones y problemas como “el riesgo de inundaciones por arroyos cercanos, el cableado de alta tensión o la contaminación acústica”. Esas barreras legales – según la legislación urbanística de la Comunidad de Madrid- serían las que solo permitirían mantener el 25% de las viviendas levantadas en la Cañada Real.

Esa sería la excepción. Al resto, les espera otro futuro. La mayoría de las familias que se vean afectas por esos derribos serán “realojadas fuera de la Cañada” y otras, según el comisionado de la Comunidad “tendrán un realojo en altura”, es decir, serán reubicadas en torres de viviendas. Pero los vecinos afectados no quieren ni una cosa, ni la otra. De entrada, denuncian que con el informe conocido ahora, de las 2.700 viviendas levantadas en la Cañada, “solo podrían mantenerse como mucho 400”, según alerta Ángel García, vecino del sector V de la Cañada, y uno de los portavoces de las asociaciones de vecinos.

Durante toda la mañana, más de un centenar de personas, procedente de los 6 sectores afectados, se han manifestado frente a la Asamblea de Madrid. Lo han hecho para denunciar que las limitaciones que la Comunidad de Madrid ha puesto sobre la mesa para justificar los derribos, como por ejemplo, los problemas acústicos, “son ridículas”, de hecho, los propios vecinos, han hecho mediciones acústicas para demostrarlo. Las asociaciones de vecinos también han denunciado que nadie les ha invitado a la reunión técnica, que se ha celebrado en la Asamblea de Madrid, entre los tres ayuntamientos implicados – Coslada, Rivas y Madrid- y los cuatro grupos parlamentarios, PP, PSOE, Ciudadanos y Podemos. En esa reunión, se ha puesto sobre la mesa este informe. El comisionado de la Comunidad de Madrid ha tratado de suavizar el enfado de los vecinos. José Martínez Páramo ha adelantado que han encargado nuevos informes para ser más exactos y más precisos sobre las afecciones de las viviendas, su intención es concretar y ver si hay margen para ampliar ese escaso 25% de las viviendas que estarían a salvo de las piquetas.