Derrota por incomparecencia

Valencia

Lo decía Pedro Martínez en la pausa previa al inicio del tercer cuarto y la frase suponía un presagio de lo que estaba por llegar. Para ganar en el Palau Blaugrana hay que creérselo. A excepción de los minutos siguientes a ese flash a pie de pista con los compañeros de Movistar, Valencia Basket dio la impresión de ser un equipo acomplejado, empequeñecido, inseguro. Incapaz de resistir el más mínimo golpe. Teniendo delante a jugones como Tyrese Rice y Justin Doellman (43 puntos entre ambos), el equipo taronja eligió un mal día para flaquezas en el alma. 

La puntuación final del Barça Lassa, 94 puntos, evidencia simple y llanamente que Valencia no fue capaz de encontrar su versión competitiva. La segunda mejor defensa de la ACB no puede encajar 25, 19, 27 y 23 puntos si pretende aspirar a algo importante en los próximos seis meses. Prueba evidente de la debilidad en el ánimo del equipo de Pedro Martínez fue el parcial encajado durante la inocente zona exhibida en la recta final del segundo cuarto, que originó un parcial de 11-1 para el conjunto blaugrana. 

Especialmente llamativo es el caso de los bases. Fundamentalmente de Guillem Vives. Pretendido por el Barça en verano, sus prestaciones han descendido de forma alarmante desde octubre. Anoche no llegó a los 7 minutos en pista. Una de las cuestiones que el grupo debe resolver con urgencia para llegar del mejor modo posible a las dos siguientes citas, ambas fundamentales: el TOP 16 Eurocup y la fase final de la Copa del Rey.