En libertad con cargos el vecino de La Solana que amenazó a los sanitarios del centro de salud con una escopeta

Ciudad Real

Ya ha sido puesto en libertad con cargos. Se le acusa de un delito de amenazas. Eso sí, la jueza ha ordenado la incautación de la carabina y cualquier otra arma que pudiera tener y ha decidido, como medida cautelar, prohibirle el uso y tenencia de armas, incluyendo, las que no necesitan permiso o licencia. 

El hombre que irrumpió ayer en el centro de salud de La Solana con una escopeta de aire comprimido amenazando a los sanitarios ha pasado a disposición judicial de los juzgados de Manzanares tras ser detenido por "amenazas" nada más ocurrir el incidente.

Se trata de un vecino de La Solana, de unos 57 años, quien estaba enfadado porque "no le facilitaban la medicación que necesitaba para su tratamiento ni en el centro de salud ni en la farmacia". Así lo ha indicado en la SER, José Luis Jiménez, secretario general del Sindicato Médico de Castilla-La Mancha (Cesm) que junto con el Sindicato de Enfermería Satse han condenado los hechos. Este mediodía se han concentrado a las puertas del centro de salud donde se ha leído un manifiesto pidiendo que se adopten medidas para garantizar la seguridad de los trabajadores.

Desde el Sindicato Médico de Castilla-La Mancha se insiste en exigir a la Administración que en el marco de un Plan General de Riesgos Laborales, se negocie de forma inmediata y se doten todos los centros sanitarios de medidas como el botón del pánico, cámaras de seguridad y vigilantes jurados. Exigen, también, herramientas ágiles y prácticas que den una respuesta jurídica inmediata ante las agresiones.

También el sindicato de Enfermeria Satse considera inaceptables estas agresiones y recuerda que están tipificadas como un delito contra la autoridad sanitaria, recordando que este centro de salud ha sido objeto de diversos actos vandálicos. Piden la revisión del plan Perseo que se está mostrando clarametne insuficiente para resolver los conflictos y se insta a los profesionales sanitarios a que denuncien las agresiones físicas y verbales.

Lamentan que las agresiones están siendo reiteradas. Las últimas en Socuéllamos o Toledo, donde otra persona atentó contra el coche de uno de los profesionales.