Se acabaron los atascos en el nudo de Espinardo
El mayor punto negro de la Región de Murcia y de España, con cien mil vehículos diarios, será ahora más fluido gracias al nuevo enlace de la A-7 y la A-30
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Murcia
Sin embargo, todavía habrá que esperar a la construcción de los arcos Norte y Noroeste de la Ciudad de Murcia para acabar, de una vez, con la gran densidad de tráfico en la zona comprendida entre los grandes centros comerciales del norte y el campus de Espinardo.
Esta ha sido la principal revindicación que el presidente de la Comunidad Autónoma, Pedro Antonio Sánchez, y el Alcalde de Murcia, José Ballesta, han hecho ante los medios de comunicación. Este enlace solucionará parte del problema, pero no todo, que supone la entrada en la Ronda Oeste del tráfico que pasa de largo por la ciudad hacia Andalucía, el centro de la península o hacia levante. Un tráfico de más de cien mil vehículos día de los que hay una gran cantidad de camiones.
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El nueve enlace beneficia, especialmente, a los conductores que procedentes de la A-30 y que entran en la A-7 dirección Andalucía y Cartagena. Hasta ahora, se formaban espectaculares atascos en horas puntas y en operaciones especiales ya que había un solo carril. Desde hoy son dos y la incorporación a este enlace se hace en un tramo largo de dos kilómetros.
La obra ha costado casi seis millones de euros y se ha realizado en diez meses, casi siempre de noche para evitar dificultades en la circulación.
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