Los transportistas palentinos dibujan un panorama negro en este 2018

Palencia

Las subidas de los carburantes, de los peajes, la obligatoriedad de transitar por autovías en muchas zonas de España y el intrusismo profesional proovocan que la patronal de los transportistas palentinos, EAMPATRA, vea este 2018 con poco optimismo. Cuando parecía que el sector comenzaba a salir de la crisis todas estas circunstancias pueden volver a ponerlo en peligro.

Los transportistas entienden que existan tramos de carretera con una excesiva concentración de vehículos, pero considera que no se les puede obligar a coger las autopistas cuando en muchos casos estas no disponen de los servicios básicos que ellos necesitan. Oscar Baños, presidente de AEMPATRA Palencia, pone como ejemplo la AP 68, de Logroño a Tudela, que tan sólo cuenta con dos áreas de servicio una con 8 plazas y otra con 16 para aparcar vehículos pesados a todas luces insuficientes para albergar todos los camiones que se prevé transiten por ella. Se pregunta cómo lo hacen para dormir, comer o simplemente descansar un rato de la conducción ajustándose a la normativa y al registro de los tacógrafos. Pide que se les de la opción de elegir por donde circulan o al menos la posiblidad de salir de las autopistas sin asumir ellos todo el coste. Medidas como la adoptada en Guipuzcoa de transformar una nacional, pagado por todos, en una carretera de peaje sóloasumida por los transportistas son un despropósito.