Aguilar espera con cautela posibles novedades sobre las niñas desparecidas en 1992
Se está a la espera de los resultados de la prueba de ADN de una mandíbula encontrada en un pantano y su posible vinculación con la desparición de Virginia y Manuela

Foto difundida en su día tras la desparición de las niñas / cadenaser.com

Palencia
La mandíbula que apareció en el Pantano del Ebro es de una adolescente fallecida hace 25 años. Así titulaba el Diario Montañés una de sus últimas informaciones sobre el hallazgo que ha generado expectación y cautela en Aguilar de Campoo. Porque ahora se trata de establecer si hay vínculos entre este hallazgo y el caso de las dos niñas de Aguilar, Virginia y Manuela, que desparecieron en Reinosa. El Diario de Burgos publicaba que la mandíbula, hallada por un vecino en el pantano del Ebro pertenece a una adolescente de entre 13 y 16 años, fallecida hace un cuarto de siglo.
Lo siguiente es esperar resultados sobre el análisis de ADN que se ha encargado. Fuentes de la investigación consultadas por este El Diario Montañés, confirmaron el relato de los hechos hasta el momento y la decisión de cotejar los restos encontrados con los que las autoridades disponen en la base de datos que se utiliza para este tipo de casos -el 'Programa Fénix', que cuenta con el ADN de familiares directos que, voluntariamente, han donado una muestra biológica para ser analizada y, así, poder establecer comparaciones con el de restos que no estén identificados-. Dientes y huesos contienen una información que puede ser decisiva




