Paco Cepero: "Para tocar bien por jaleos hay que imitar a los extremeños"

Mérida

Leyenda viva del flamenco, Paco Cepero (Jerez de la Frontera, 1924) le ha tocado a los más grandes: La Paquera, Camarón de la Isla, El Lebrijano, Antonio Mairena, Caracol, El Turronero o Borrico de Jerez. Cuenta con varios premios de renombre como la Medalla de Andalucía, la Medalla de Oro al Mérito de las Bellas Artes que recogió en Cáceres, el Nacional de Guitarra Flamenca de la Cátedra de Flamencología de Jerez, el Concurso Nacional de Arte Flamenco de Córdoba, la Giraldilla de Oro de Lebrija o el Premio Nacional de la Cátedra de Flamencología.

Acaba de cumplir seis décadas sobre los escenarios y lo celebra con nueva obra, ‘Sueño latino’, su sexto disco en solitario tras ‘Amuleto’ (1977), ‘De pura cepa’ (2000), ‘Corazón y Bordón’ (2004), ‘Abolengo’ (2007) y ‘Suite Gades’ (2012). Aunque sería imposible condensar su enorme trayectoria, en SER Flamencos repasamos con el tocaor sus 60 años viviendo entre las seis cuerdas de su guitarra que suena intensa, con personalidad, con mucho compás y gran limpieza. Cepero nos confiesa su simpatía por Extremadura, su admiración a Porrina, su cariño por La Marelu y reconoce que para tocar bien por jaleos hay que imitar a los extremeños.

Además en ‘Ole los flamencos’ la doctora en Antropología, Cristina Cruces, nos ilustra sobre la figura de Pastora Pavón ‘la Niña de los Peines’ y en la sección ‘Por peteneras’ la redactora de El Periódico Extremadura, Gema Guerra, nos cuenta su sentir flamenco.

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