De pastor a poeta, así se puede resumir la historia de José Anselmo Oruj. Tras pasar buena parte de su vida en el campo dedicada la cría de vacuno de leche en Castiliscar (Zaragoza), José Anselmo aprovecha ahora su jubilación para escribir poemas. Amante de la historia y literatura, acaba de publicar su primer poemario, «300 biografías sobre ilustres aragoneses». Inquieto, reflexivo y constante, así es José Anselmo Oruj. Virtudes que sin duda adquirió en el sacrificado oficio de pastor. Tras jubilarse, dejó a un lado la alforja y los madrugones para dedicarse a su otra vocación, la escritura. «Resulta que implantaron aquí (en Ejea de los Caballeros) el aula de la UNED y me apunté a Historia, afortunadamente aprobé y me dediqué a escribir pequeños poemas». Oruj está emocionado. «Están escritos en un lenguaje muy coloquial y la gente de a pie lo entiende mejor en este lenguaje». Versos que verán la luz en su primer libro: «300 aragoneses ilustres». Amante de la historia, explica de forma breve, sencilla y a través de poemas, la vida de 300 aragoneses destacados en disciplinas como la pintura, la política, la arquitectura o el deporte. Alguno de ellos Goya, José María Forqué, María Moliner, Eva Amaral o Teresa Perales. No falta la historia de cincovilleses, como él, con espacio para el rector Mamés Esperabé o el pintor ejeano Vicente Berdusán.