Satisfacción contenida
Lo de Montoro y el superavit de los ayuntamientos era de una obstinación y de una contumacia bastante singular y difícil de entender
La Columna de Carlos Arcaya | Satisfacción contenida | 28/02/2018
00:55
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
<iframe src="https://cadenaser.com/embed/audio/460/085RD010000000078741/" width="100%" height="360" frameborder="0" allowfullscreen></iframe>
Alicante
Lo de Montoro era de una obstinación y de una contumacia bastante singular y difícil de entender por unos ciudadanos que veían cómo las administraciones más cercanas no podían atender a las muchas necesidades, ni tapar los agujeros que han ido apareciendo conforme transitaba esta década de crisis. Es difícil de comprender que no se haya podido atender esas necesidades básicas pese a tener superávits.
Y es que la mayoría de consistorios -salvo honrosas excepciones- nunca han sido unos manirrotos, ni han provocado el déficit del estado y por lo tanto, no se entendía el ensañamiento.
Sin embargo, si la satisfacción es contenida, es porque esa tutela sobre los proyectos municipales seguirá ya que estas inversiones tendrán que ser autorizadas finalmente por el ministerio de Hacienda.
Y tampoco debemos olvidar que la decisión se produce en el contexto en el que se produce: con la vista puesta en las elecciones de 2019 y en un momento, en el que el PP corre el riesgo de ser adelantado en muchos municipios por Ciudadanos.