Un fenómeno tan sucio como costoso en Toledo: los chicles que deben retirarse de las aceras
El Ayuntamiento destina personal y material específico para su retirada
Toledo
Un fenómeno tan sucio como costoso: los chicles pegados que hay que quitar de las aceras en Toledo. Su retirada se contempla dentro del contrato ordinario de limpieza y recogida de basuras de la ciudad , pero necesita de maquinaria y personal especializado.
En declaraciones a 'SER Toledo', la concejala de Servicios Públicos Medioambientales, Noelia de la Cruz ha recordado que los puntos negros de limpieza de chicles se sitúan en el entorno de centros educativos y sanitarios.
Pone como ejemplo la Avenida Barber, donde se asienta el Hospital de Toledo, el Paseo de San Eugenio, donde hay dos institutos, o la Avenida de la Reconquista, una de las más transitadas de la ciudad. Sin embargo, el casco histórico no es una zona especialmente sensible en este sentido.
Dice la edil, que es difícil cifrar el coste de este tipo de limpieza , pero recuerda que supone un esfuerzo importante porque requiere de material y personal cualificado. "Hay superficies donde la retirada es muy costosa", como superficies porosas, irregulares o pavimentos de piedra.
Esto necesita de maquinaria especial, a través de "productos de naturaleza química o de elevación de temperatura" para lo que el personal que realiza esta labor necesita "una formación específica en el uso y el manejo de esta maquinaria y también en la prevención de los posibles riesgos laborales que se puedan derivar de su utilización".
Por último, Noelia de la Cruz hace un llamamiento para usar papeleras y evitar que los chicles y otros residuos terminen en la vía pública.
Daniel Rodríguez González
Redactor de Informativos en la Cadena SER desde el año 2006. He trabajado en las emisoras de Alcalá...